Trabajarán 10 facultativos y 11 analistas y auxiliares
MURCIA. La batalla contra la covid-19 no acabará sólo cuando la vacuna inmunice a la población y los positivos -especialmente las consecuencias de los contagios: los hospitalizados graves- queden relegados al mínimo. Quedará también el papel de la ciencia, cuya labor ha sido, es y será crucial para ahondar en un virus que trastocó la vida de todo un planeta. Esta necesidad ha llevado a la Comunidad a tener que dar un impulso a la investigación científica y, para ello, mejorará las actuales infraestructuras en este campo, cuyo principal centro, el laboratorio regional, se encuentra en la Consejería de Salud.
Así las cosas, el Gobierno regional pretende instalar un nuevo laboratorio junto a las inmediaciones del hospital Reina Sofía de Murcia. La Comunidad invertirá 1.302.448 euros (que se pagará en dos años: 795.202 euros en 2021, y el resto en 2022) para reformar el edificio de mantenimiento del céntrico hospital murciano y convertirlo en el nuevo Laboratorio Regional de Salud Pública.
Las obras, que este jueves recibieron el visto bueno del Consejo de Gobierno, tendrán un plazo de ocho meses. Antes se iniciará la adjudicación del contrato, explicaron fuentes de Salud. Este proceso, de unos tres meses, se llevará a cabo mediante un procedimiento abierto con varios criterios de adjudicación. Desde Salud confían en que la instalación esté terminada antes de acabar el año 2022. El 80% de la financiación procederá de los fondos Féder.
"El nuevo emplazamiento, junto al Reina Sofía, es idóneo", destacó el consejero de Salud, Juan José Pedreño. "Nos permitirá dar respuestas a todas las necesidades que nos han impuesto el coronavirus". En el laboratorio trabajarán 10 facultativos, 11 analistas y auxiliares, así como dos administrativos, según detallaron fuentes de Salud a este periódico.
¿Qué acciones llevará a cabo el laboratorio? Según explicó Pedreño, los investigadores podrán abordar "nuevas líneas de trabajo exigidas por la pandemia mediante métodos basados en PCR". Además, se pondrá en marcha la investigación e implantación de una línea de análisis de aguas residuales, incluyendo el rastreo del coronavirus.
El rastreo de las aguas residuales no es una novedad en la Región. En el municipio de Murcia, los técnicos ya llevaron a cabo esta función en los barrios de San Andrés y El Carmen, donde analizaron las alcantarillas para comprobar la evolución de los contagios. Estas muestras son claves para luchar contra la pandemia, ya que permiten predecir y contrarrestar el aumento de las infecciones en zonas concretas. No en vano, a mayores trazas de covid-19 en las aguas residuales, más contagios se producen en determinados lugares, con lo que, si se actúa con celeridad, se puede frenar el avance del virus.
Las obras del edificio del Reina Sofía, indicaron también desde Salud, "permitirán garantizar el suficiente grado de aislamiento con otros recintos, la disponibilidad de todas las dotaciones necesarias para reducir los riesgos de exposición frente a agentes biológicos en cuanto a espacios de almacenamiento, vestuario e higiene de los trabajadores y el cumplimiento del resto de requerimientos normativos vigentes en materia de seguridad, salubridad y funcionalidad".