MURCIA (EP). Un equipo de investigadoras e investigadores de la Universitat Politècnica de València, pertenecientes al grupo de Biodiversidad Microbiana del Ciclo del Agua (BIOMICA) del IIAMA y al Centro Avanzado de Microbiología de Alimentos (CAMA), ha llevado a cabo un estudio sobre la seguridad alimentaria de productos frescos orgánicos que pueden ser consumidos en crudo, que subraya la importancia de controlar la seguridad alimentaria de frutas y verduras orgánicas.
Este trabajo se enmarca dentro del proyecto ECOFOOD, subvencionado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades en la convocatoria 'Proyectos de I+D+i Retos Investigación', y está coordinado por Mª Antonía Ferrús y Yolanda Moreno. Sus resultados los publica la revista 'Food and Waterborne Parasitology'.
El estudio del equipo de la UPV aboga por mejorar y promover medidas preventivas para reducir los riesgos asociados con la contaminación microbiológica de dichos alimentos, ha indicado la universidad en un comunicado.
Mediante técnicas avanzadas de inmunofluorescencia y qPCR, el equipo del IIAMA analizó la presencia de varios protozoos patógenos, incluidos Acanthamoeba, Blastocystis sp., Cryptosporidium spp., Cyclospora cayetanensis, Entamoeba histolytica, Giardia sp., Toxoplasma gondii y Vermamoeba vermiformis, en un total de 110 muestras orgánicas de lechuga, espinaca, col y fresas recogidas en mercados locales de Valencia.
En este sentido, la primera autora del estudio e investigadora del grupo BIOMICA-IIAMA de la UPV, Laura Moreno Mesonero, ha resaltado que "conocer los posibles riesgos microbiológicos asociados con la producción de frutas y verduras procedente de cultivo orgánico, en un escenario marcado por la escasez de agua y la necesidad de conservar los recursos naturales, ayudaría a implementar medidas de tratamiento y desinfección efectivas para garantizar la seguridad microbiológica del agua reutilizada". Junto a Moreno, firman este trabajo Lara Soler, Inmaculada Amorós, Yolanda Moreno, Mª Antonia Ferrús y José Luis Alonso.
El estudio representa un avance significativo en la investigación de la seguridad alimentaria, ya que proporciona información valiosa para reguladores, productores de alimentos y profesionales de la salud pública.
"Los resultados revelan que los consumidores pueden estar expuestos a protozoos patógenos al consumir vegetales orgánicos crudos, al igual que ocurre con los vegetales de agricultura convencional", han apuntado las investigadoras del estudio, al tiempo que ha agregado que, por ello, "se deben abordar los riesgos microbiológicos de manera integral y aprovechar el potencial de la reutilización del agua, mientras se protege la salud pública y se promueve la sostenibilidad ambiental".
En esta línea, han destacado que, "como medida preventiva, es importante realizar un buen lavado de los vegetales, tanto orgánicos como convencionales, antes de su consumo".
Finalmente, el trabajo realizado por el equipo del IIAMA y CAMA de la UPV contribuirá al desarrollo de futuras investigaciones en este campo y a la promoción de medidas preventivas para reducir los riesgos asociados con la contaminación microbiológica en los alimentos.
"Al comprender mejor los posibles riesgos y adoptar enfoques proactivos para mitigarlos, podemos garantizar la seguridad alimentaria, impulsar la reutilización y promover prácticas sostenibles en la producción de frutas y verduras orgánicas frescas", han concluido.