MURCIA (EP). Un total de 143 locales han solicitado al Ayuntamiento de Murcia colocar barras en la vía pública con motivo de las Fiestas de Primavera. El pasado 3 de marzo terminó el plazo para solicitar al Consistorio la instalación de barras en la ciudad, barrios y pedanías, tras ser aprobadas las bases en una reunión de la Junta de Gobierno.
Este año, la concesión conlleva el cumplimiento de medidas para mejorar la seguridad y la accesibilidad y para que no se sobrepasen los decibelios permitidos. Una vez finalizado el período de petición, se estudiará por parte de la Concejalía que cumplan todos los requisitos para otorgar el permiso.
El objetivo del Ayuntamiento es garantizar unas fiestas seguras, buscando el equilibrio entre la celebración de esas jornadas festivas y el descanso vecinal. Las principales novedades con respecto al pasado año es la obligación de disponer de aseos, que no se sobrepase el volumen y horario de la música para respetar el descanso vecinal, y la aplicación de la normativa de seguridad para garantizar la accesibilidad.
Respecto a los aseos, en las bases generales se ha incluido como novedad que los locales que obtengan la autorización, aunque no vayan a prestar servicio en el interior, deben permitir a los usuarios de la barra el acceso a los baños de sus locales o, en su defecto, contratar aseos portátiles para los consumidores.
En cuanto a la música en la calle, destaca como novedad, para generar el mínimo de molestias a los vecinos, que el Ayuntamiento de Murcia también va a regular el volumen de la música, teniendo que disponer los locales limitadores para que la música no supere los niveles autorizados.
Además, el horario del uso de equipos de reproducción musical o de sonido será de 12.00 a 22.00 horas como máximo, al tratarse de un evento de especial interés turístico y social.
Otra de las novedades es que se mejora la seguridad, estableciendo unas medidas para que puedan circular sin dificultad los vehículos de emergencia. En concreto, se ha establecido que se deberá respetar en todas las calles una anchura libre mínima de 3,5 metros y una altura libre mínima de 4,5 metros.
En las zonas de ángulos de calles donde se pueda prever el giro de vehículos de emergencia, se deberá dejar libre de obstáculos desde la esquina una longitud de 7 metros con ancho de paso libre de 7,20 metros.
Además se deberá respetar la accesibilidad necesaria a los zaguanes de los edificios de viviendas, que permitan el acceso a camilla o sillas de ruedas para una posible evacuación de residentes, debiendo dejar un paso libre frente a cada zaguán más ancho que en 2023, pasando de 1,50 a 1,80 metros.
Igualmente, se ha contemplado la mejora de la accesibilidad para todos los ciudadanos incluyendo en estas Bases como novedad que en ningún caso se bloqueará ni se invadirán los espacios destinados al paso de itinerarios peatonales accesibles, ni a pasos peatonales, pasos ciclistas, accesos a portales, garajes y otros, ni se alterarán pendientes longitudinales ni transversales de sus vados. Al igual que su ubicación, ya que se establece que las barras deberán orientarse de manera que el público acceda desde la zona peatonal, evitando que los peatones invadan los carriles de circulación.
Tampoco podrán instalarse barras en el espacio peatonal que ocupan las paradas de taxis y las paradas de bus urbano, ni en su ámbito, es decir, debe mantenerse libre de obstáculos los espacios de calzada y de acera.
El pasado año se concedieron permisos para la instalación de 122 barras para ambas jornadas.