MURCIA. García Carrión, la firma vinícola de origen jumillano propietaria de marcas como Don Simón o Pata Negra, ha logrado mantener el crecimiento de doble dígito en su negocio y consolidarse como una de las tres únicas empresas en romper la barrera de los 1.000 millones de euros de facturación.
No en vano, fue capaz de cerrar el ejercicio 2023 con unas ventas de 1.142 millones obtenidos en el 2023, lo que supone mejorar en un 10% los números que alcanzó en el 2022, cuando se quedó en los 1.037 millones de euros. Además, consolida la tendencia de crecimiento estable que venía mostrando hasta ahora, pues cada uno de los tres últimos años ha logrado incrementar sus cifras en un 10%.
Como ya venía ocurriendo, los zumos siguen ganando peso en la estrategia de negocio de García Carrión, pues representan casi el 70% de las ventas totales. En concreto, supusieron unos ingresos de 721 millones de euros, un 13% por encima de los 638 millones de euros que recaudaron en el 2022. Por el contrario, el crecimiento de los vinos se mantiene más modesto, pues la subida fue del 5% hasta los 410 millones de euros.
Por su parte, el beneficio quedó consolidado en el entorno de los 50 millones de euros, pues alcanzó los 48,5 millones en el ejercicio correspondiente al 2023. En cualquier caso, cabe resaltar que se trata de una reducción del 2% respecto al año anterior, cuando se llegó hasta los 49,4 millones.
Sin embargo, si se tiene en cuenta el Ebitda, el resultado antes de intereses e impuestos, la evolución sí que resulta positiva, pues se registraron 132 millones en el 2023 frente a los 125 millones del 2022.
En los últimos años García Carrión ha impulsado proyectos de mejora y ampliación de las diversas instalaciones que dispone, como es el caso de la inversión de 10 millones de euros en energía renovable. Además, la trayectoria tanto del grupo como del sector hacen esperar que durante este 2024 la empresa pueda consolidar su posición en los mercados y sea capaz de mantener una línea de expansión en volumen de negocios, según indica la propia firma jumillana en su hoja de resultados. De hecho, apunta que si las expectativas se cumplen estaría en situación de "animarse a acometer nuevos proyectos de inversión".
Además, precisamente para ello acaba de fichar a Paulo Soares como nuevo director general de todo el grupo. Al fin y al cabo, Soares está llamado a implementar estrategias que refuercen el crecimiento y la expansión internacional de la empresa, alineándose con las tendencias actuales del mercado. De hecho, la firma jumillana ha puesto el foco en expandir su presencia en mercados internacionales, un objetivo para el que espera apoyarse principalmente en la innovación y la sostenibilidad.
No obstante, y aunque la gestión diaria quedará en manos de Paulo Soares como nuevo director general, la familia seguirá involucrada en la empresa. No en vano, José García-Carrión se mantendrá como presidente, apoyado en todo momento por Rafaela Corujo y por el hijo de ambos, Luciano García-Carrión, que representa a la quinta generación de esta saga.