MURCIA. Un verano más, el escultor murciano Ismael Cerezo (Flyppy) ha sacado a sus "bichos' -cómo él los llama- de su taller del barrio del Progeso de Murcia para que se refresquen en San Pedro de Pinatar, donde el artista residen en verano. Así, un total de 50 de estos seres mágicos y coloridos, surgidos de la imaginación del artista -quien les ha otorgado vida a partir del hierro, el acero y el vidrio-, se pueden contemplar en el Centro de Iniciativas Turística del municipio marmenorense hasta el 5 de septiembre.
Flyppy ha titulado esta exposición Celentéreos, aunque el visitante podrá contemplar en ella, además de las medusas, muchas otras especies que habitan en los océanos y que han inspirado al escultor murciano, quien desde hace más de 30 años se dedica a recrear una naturaleza -principalmente animales marinos e insectos- que ya desde niño le hacía soñar en colores. Así, medusas, ermitaños o caballitos de mar habitan esta muestra, que también acoge otros animales y plantas a los que Flyppy ha dado forma, como flamencos, cactus, camaleones o caracoles.
Este particular universo de Flyppy, en el que sus bichos se desenvuelven felices, se transforma a ojos del comprador en esculturas de sobremesa, lámparas, percheros...
La muestra ha sido inaugurada por el artista y la alcaldesa de la localidad, Visitación Martínez. Cabe destacar que Flyppy, afincado durante el verano en la pedanía de El Mojón, comparte su arte con los vecinos de San Pedro del Pinatar desde hace más de cinco años con diversas exposiciones monográficas durante el mes de agosto en espacios como el Centro de Iniciativas Turísticas, que anuncia desde el exterior esta muestra con dos imponentes esculturas en las fuentes de acceso al mismo.
Y es que Flyppy también es autor de grandes esculturas públicas y privadas, como se puede contemplar en distintos puntos de la Región. El pasado mes de julio estrenó su última gran obra, Explosión de primavera, en Lorquí, junto a la famosa noria de la localidad, que consta de cinco flores adornadas con caracoles, como una alegoría de la primavera, de 6 metros de altura.
El artista murciano también es el creador de la escultura Túnido, atún tuneado de la rotonda de Miguel de Cervantes y del Homenaje al agricultor, en la plaza Díez de Revenga, ambas en Murcia; del conjunto escultórico Manaderos del Álamo, a la entrada de Fuente Álamo; del Algarrobo, en el acceso de la autovía en Totana; de las Garzas engarzadas, en el exterior de la clínica Virgen de la Caridad de Cartagena; o de los flamencos junto a centro comercial Pinatar Park, entre otras muchas obras públicas.