MURCIA (EP). Un estudio liderado por la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana (Fisabio) y la Universidad Complutense de Madrid (UCM), llevado a cabo con pacientes del Hospital Arnau de Vilanova de Valencia, señala que personas con cáncer de colon tienen niveles más altos de anticuerpos frente al parásito anisakis, que puede encontrarse en el pescado.
En este sentido, la investigadora del departamento de Microbiología y Parasitología de la UCM, la profesora Carmen Cuéllar, ha remarcado que "esto quiere decir que estos pacientes han entrado en contacto con las larvas de este parásito en mayor medida que el resto de la población, lo que sugiere una asociación entre anisakis y el cáncer de colon".
La inflamación crónica como resultado de una infección persistente puede provocar daños en el ADN, mayor expresión de oncogenes, disminución de la apoptosis (proceso de muerte celular) e inmunosupresión. Estas son algunas de las razones de la inducción del cáncer. Por este motivo se planteó la hipótesis de una relación entre anisakis y el cáncer, porque las respuestas celulares a los productos liberados por las larvas de anisakis podrían provocar inflamación y daño al ADN.
"Hace más de tres décadas, ya incluso se postulaba que anisakis pudiera estar relacionado con el cáncer gástrico, comprobándose el potencial tumorigénico de los productos liberados por las larvas, pero hasta la fecha no había evidencias que sugirieran una relación entre este parásito del pescado y el cáncer de colon", ha explica la doctora Cuéllar, según ha indicado la Generalitat en un comunicado.
Para llevar a cabo el estudio, publicado en 'Parasitology Research', se reclutó a 92 pacientes con cáncer de colon diagnosticados en el Hospital Arnau de Vilanova de València y se incluyeron 60 personas sanas sin cáncer (grupo control). En primer lugar, se procedió al examen de las células de la sangre (análisis de los linfocitos T, células que ayudan a proteger al cuerpo de infecciones y a combatir el cáncer, y evaluación de la apoptosis) en el laboratorio de hematología del Hospital Arnau de Vilanova.
Después, en el laboratorio del Departamento de Microbiología y Parasitología de la UCM se preparó el antígeno de larvas de anisakis extraídas de bacaladillas y se realizó la determinación de anticuerpos específicos en el suero de personas con cáncer de colon y en el del grupo de control sano.
"En nuestro grupo ya habíamos descrito correlaciones entre algunos parásitos y el cáncer de colón; incluso en las fases tempranas y premalignas. Este estudio revela la posibilidad de identificar personas con una mayor susceptibilidad a la enfermedad y el potencial de generar nuevos mecanismos para prevenirla", explica el responsable del grupo de Oncología clínica y molecular de Fisabio en el Hospital Arnau de Vilanova, el doctor Antonio Llombart Cussac.
Anisakis es un nematodo, un tipo de gusano que parasita el estómago de los mamíferos marinos. Los huevos producidos por las hembras se desarrollan en el agua. Algunos crustáceos marinos ingieren estas larvas y, tras esto, los peces que se comen a estos crustáceos quedan infectados.
Los humanos pueden actuar como hospedadores accidentales al consumir pescado crudo o poco cocinado. Este parásito de transmisión alimentaria causa graves problemas de salud pública en todo el mundo. Los parásitos localizados en la mucosa gástrica o intestinal pueden causar afectación gastrointestinal. Además, anisakis también puede provocar reacciones como urticaria, angioedema, asma y anafilaxia.
"Los linfocitos T analizados en este trabajo son parte de la inmunidad innata y por tanto un reflejo de la respuesta inmune de los pacientes. Una disminución de estos linfocitos como se describe en el artículo pone de manifiesto no solo la relación entre anisakis y cáncer de colon, sino también la disminución de la respuesta inmune de estos pacientes oncológicos frente a este agente tumorigénico", ha subrayado la responsable del grupo de investigación en Hematología y Hemoterapia de Fisabio-Hospital Arnau de Vilanova- Lliria de Valencia, la doctora Francisca López Chuliá.