CARTAGENA. Unidas Podemos ha denunciado que el Gobierno hace un uso torticero del reglamento del Pleno para desvirtuar su trabajo. El ejecutivo local aplica una nueva "moda" en los plenos: "pasar el rodillo" presentando enmiendas a las mociones de la oposición, en el último minuto y sin que el grupo municipal afectado pueda conocer el contenido de la misma, dicen desde Unidas Podemos IU-Verdes Equo.
Denuncian que el Gobierno municipal está utilizando de un modo injusto el reglamento del pleno para desvirtuar el trabajo que hacen los grupos de la oposición.
Para la portavoz del grupo, Leli García, el ejecutivo local ha "descubierto una nueva moda", que consiste en enmendar las mociones de los grupos de la oposición, en el último minuto y sin dejar que estos tengan conocimiento del texto de la misma.
Para el gobierno esto solo es hacer uso de las herramientas que le da el reglamento del pleno, algo que desde Unidas Podemos tienen claro, pero critican que si estas herramientas las tenían desde el principio de la legislatura, ¿por qué hace solo dos meses que están haciéndolo?
Es aún más sorprendente, si cabe, añaden desde la formación, esta forma de actuar si tenemos en cuenta que en las legislaturas precedentes este tipo de posibles enmiendas se debatían en los días previos con el concejal interesado, siendo el propio grupo el que podía modificar su moción para adecuarla con el fin de que obtuviera los votos necesarios para salir aprobada.
La edil Leli García ha destacado que "exactamente igual que el Gobierno siempre dice que las puertas están abiertas, las de nuestro grupo también" y ha recordado que esta moción fue presentada el 15 de mayo, "han tenido quince días para intentar consensuar la parte resolutiva de la moción, en lugar de venirnos aquí con ‘enmiendas secretas’ a última hora".
Para García queda claro que esta forma de actuar del Gobierno responde una total falta de respeto por el trabajo de la oposición, así como demuestra que no se quiere debatir, algo que lamento la edil de Unidas Podemos IU-Verdes Equo. "Al final los que pierden son los ciudadanos y la democracia. En definitiva se anula el sentido último de los plenos, que es debatir y proponer, llevar la voz de la gente a las instituciones, y no hacer solamente lo que el gobierno imponga, utilizando las sesiones plenarias a su favor", ha concluido la edil.