MURCIA. El año que termina esta semana no ha sido fácil para el mundo empresarial, que ha tenido que reinventarse y soportar situaciones tan excepcionales como el estado de alarma o los continuos cierres perimetrales de los municipios. Pero las 1.200 compañías que forman parte del Polígono Industrial Oeste, el más antiguo de la Región, "han superado esta situación tan difícil sin apenas cierres". Así lo asegura a Murcia Plaza Antonio Castillo, el presidente de la Asociación de Empresarios (Aepio), quien resalta, no obstante, que ha habido momentos muy duros y que "se ha tenido que recurrir a los ERTES y los parones parciales de la actividad en los momentos más duros de la pandemia".
Aunque algunas pequeñas compañías han parado la actividad o están a la espera de ver si pueden reabrir, las grandes firmas que operan allí se han mantenido. Con más de tres millones de metros cuadrados, el polígono Oeste, que está situado a caballo entre los municipios de Murcia y Alcantarilla, es uno de los más potentes de toda la comunidad. Pese a los altibajos en cuanto a la actividad diaria y caídas de ésta de hasta la mitad entre marzo y abril, nunca se han cerrado las puertas de la mayoría de las firmas que allí están instaladas, salvo cuando se paró la actividad que no era esencial.
"Se ha salvado positivamente la pandemia", remarca Castillo, quien asegura que en la escuela infantil de la que disponen los trabajadores para dejar a sus hijos y poder conciliar vida laboral y familiar, "no ha habido casos de coronavirus. Se han cumplido a rajatabla las medidas de prevención y el servicio no se ha parado".
Castillo defiende el importante papel del polígono en el tejido empresarial regional así como en el empleo. "Somos la primera empresa en crear puestos de trabajo. Debemos estar preparados, para que cuando pase esta época ser el motor de la Región", declaraba recientemente a esta redacción.
Uno de los caballos de batalla de Castillo es que se lleve a cabo la ampliación del polígono, que "ya está construido al 97%", por lo que ha solicitado su ampliación a las administraciones pertinentes al otro lado de la autovía, "lo que permitiría que las empresas puedan crecer sin irse. No tenemos muchas naves libres y sí peticiones de empresas para instalarse aquí".
Castillo lamenta que por esta falta de espacio se han tenido que ir a otros polígonos empresas como Tahe, que se ha instalado en Alhama, por lo que considera primordial que "de los 18 millones de metros cuadrados que hay disponibles en la zona conocida como el colchón de los paracaidistas -por su cercanía a la base aérea de Alcantarilla-, se permita ya utilizar al menos un millón de metros".
Todo esto tiene un único objetivo. Y es que el Polígono Oeste "siga siendo la referencia regional para las empresas", asevera Castillo, quien lleva décadas al frente de la asociación de empresarios y lejos de tirar la toalla se muestra ilusionado. "En este mundo tan globalizado y con las innovaciones que estamos llevando a cabo, el Polígono Oeste es propicio para el futuro de las compañías, muchas de las cuales tienen en la exportación una vía de crecimiento".