CARTAGENA. El Fútbol Club Cartagena, encajando su segunda derrota consecutiva en LaLiga Hypermotion y viendo truncada en seco su racha de seis jornadas sin perder -cinco victorias y un empate-, continúa fuera de la zona de descenso con un punto de ventaja sobre esos puestos de castigo.
El cuadro entrenado por Julián Calero, que cayó por 3-0 ante el Burgos Club de Fútbol en un estadio El Plantío nevado y antes por 0-1 como local frente al Elche Club de Fútbol, sigue siendo el decimoctavo clasificado -quinto por la cola- con los 31 puntos en los que está anclado.
La suerte para los blanquinegros es que los rivales que podían darle alcance en la pelea por la permanencia tampoco es que estén sumando demasiado y en la vigésimo novena jornada del campeonato también perdieron, el filial del Villarreal Club de Fútbol en Elda por 2-0 y la Agrupación Deportiva Alcorcón en Elche por 3-0. Con esos resultados los castellonenses son decimonovenos con 30 puntos y los madrileños vigésimos con 29.
Sí ganaron el Fútbol Club Andorra por 2-1 al Real Valladolid y la Sociedad Deportiva Amorebieta por 0-1 en Zaragoza, lo cual da algo de vida a andorranos y vascos que son los dos últimos con 28 y 24 puntos respectivamente.
Los demás adversarios directos que tiene el Cartagena en esta lucha empataron -la Sociedad Deportiva Huesca 0-0 en Cornellà para ser decimoquinto con 33 puntos- o perdieron -el Club Deportivo Mirandés en Tenerife por 2-1 para ocupar la decimosexta plaza también con 33 y el Albacete Balompié por 2-1 en Gijón siendo los manchegos decimoséptimos con 31-.
Así pues, el Efesé afrontará su siguiente compromiso, el sábado a las nueve de la noche en el estadio Cartagonova frente al Racing de Ferrol, en el puesto que marca la línea de la salvación pero siendo consciente de que un nuevo tropiezo le podría hacer al lugar del que tanto le costó salir.
Calero, quien admitió que caer por 3-0 es "muy duro para todos", se focalizó en lo que viene sabiendo que faltan "13 finales" en el tramo final de la temporada.
"Estamos en la pelea, que era algo que hacía poco tiempo nadie pensaba que sucedería, y no voy a tirar piedras sobre mis jugadores. Ahora lo que nos toca es seguir adelante porque lamentarse no nos lleva a ningún sitio. Debemos estar pendientes del siguiente partido, en el que se pondrán en juego otros tres puntos muy importantes para nosotros", apuntó el técnico madrileño tras el encuentro de Burgos.