CARTAGENA. El pasado mes de noviembre, los vecinos del Barrio de La Concepción, popularmente conocido como Quitapellejos, convocaron una manifestación para denunciar los graves problemas que preveían con las inundaciones en algunas de las calles de la zona. Criticaban que con la puesta en marcha de la carretera que articula el nuevo vial no veían en el proyecto soluciones para evitar las inundaciones.
Las autoridades municipales se reunieron con los vecinos y les trataron de calmar, a la vez de garantizar que esas inquietudes serían resueltas con los nuevos colectores que pronto estarían en funcionamiento. De momento, ha salido licitación la instalación de colector para la mejora de evacuación de aguas pluviales en la calle Peroniño, en el tramo comprendido entre la calle Balcones y calle Malvavisco, del Barrio de la Concepción. Las obras, que tienen un plazo de ejecución de 2 meses, se han presupuestado en 308.725,34 euros (IVA incluido).
Actualmente, en varios puntos de la calle Peroniño llegan aguas de lluvia procedentes de la Atalaya que transportan gran cantidad de arrastres de piedras, tierra y vegetación produciendo un doble problema, la sedimentación y la inundación en varios puntos de la zona. Con la urbanización del Plan Parcial Rambla se han resuelto parte de los problemas del barrio, puesto que estas aguas pluviales se han interceptado en la calle Peroniño y se han canalizado mediante colectores que atraviesan la nueva urbanización.
Sin embargo, aguas abajo del barrio, ya en la zona urbana consolidada del Barrio de la Concepción, concretamente a partir de la calle Malvavisco, quedan pendientes de solución 2 puntos con fuerte escorrentía de aguas de lluvia. En esta zona las redes existentes son unitarias, muy antiguas, en mal estado de conservación y con una capacidad insuficiente lo que producen con frecuencia graves problemas de inundación.
Con la instalación de este nuevo colector se soluciona este problema. Las obras comprenden también el desvío de la red de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, se realizarán 4 arquetas arenero, 3 de ellas en los cruces de Peroniño con las calles Caserío Sevilla, Subida a los Pinos y Castillo a la Mota y la 4ª en la calle Malpica, para la recogida de sólidos y arrastres de material en las aguas de lluvia procedentes de los Montes de la zona. Por último, se realizaran 13 rejillas transversales y se conectarán a la nueva red 12 imbornales existentes en la calle Peroniño actualmente conectados a la red de saneamiento y se ampliaran 15 imbornales longitudinales existentes. Se realizara una nueva arqueta para cada imbornal adaptándolo al tamaño de la rejilla.
Los vecinos temían que el problema que sufre el barrio desde hace años con inundaciones por los arrastres procedentes de la Atalaya quedará aparcado, mientras se agilizaban los proyectos del Plan Rambla. "Les dimos nuestra palabra de que ambas actuaciones se harían en paralelo y que en primavera el Ayuntamiento licitaría este proyecto y así ha sido", explicó la alcaldesa Ana Belén Castejón.