Desatada la Alcarazmanía 

MURCIA. Ese fenómeno que es jugando al tenis -Carlos Alcaraz Garfia Garfia- viene acompañado por otro fenómeno -la Alcarazmanía-, que se encarga de fomentar el número 1 del tenis mundial, un chico que está siendo el mejor en la pista y, además, está a la altura fuera de ella.

Su imagen ya es universal y a Carlos, esté donde esté, le cuesta dar diez pasos seguidos cuando sale a la calle, ya sea en Murcia, en Madrid o en Nueva York, donde se coronó en la cima de su deporte.

Al de El Palmar se le ve cómodo conviviendo con quienes le idolatran y la recepción que se le brindó este viernes en el Palacio de San Esteban es un claro ejemplo.

El flamante ganador del Abierto de Estados Unidos, tras compartir un rato con el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, quien se deshizo en elogios, y otro con los periodistas, que le preguntaron de todo, hasta de una novia que dejó de serlo hace ya más de un año, lo tuvo fácil para salir montado en su coche, un flamante BMW -la firma de automoción que le patrocina- e irse. Sin embargo, optó por dejarse ver y atender a las decenas de aficionados que le esperaban a la salida de la sede del Gobierno regional.

El tenista no negó el autógrafo ni la fotografía a los seguidores y, aunque tardó un buen rato en llegar a subirse en el vehículo, no se le vio ni un mal gesto cuando estaría deseando alejarse para poder dar una vuelta con sus amigos, tal y como dijo que haría.

Resulta obvio que a Alcaraz le hace falta un parón para descansar física y mentalmente, aunque sea mínimo, y así desconectar tras la exigente gira americana que concluyó con su título en el US Open y el número 1 de la ATP que llevó aparejado.

Allá por donde va el foco apunta al nuevo líder del tenis y su imagen forma parte del paisaje urbano de muchas ciudades y Murcia, no podía faltar.

En la avenida Gran Vía de Murcia El Corte Inglés ha fijado en uno de sus escaparates una foto suya con el mensaje "Campeón US Open 2022. Número 1 del mundo ¡Y es murciano! ¡Muchas felicidades, Carlos. Orgullosos de ti!".

Ya no es que sus patrocinadores exploten su imagen, sino que hasta las empresas que no lo son piensan en el tenista para darle su apoyo.

Con éxitos como los que está logrando y con comportamientos como el que mostró a su salida de San Esteban, Carlos se está metiendo en el bolsillo a todo el mundo y hace que se desate la Alcarazmanía.