MURCIA (EFE). El déficit público -sin contar con las entidades locales- se situó en 29.764 millones de euros en el primer semestre, una cifra que equivale al 1,92 % del PIB y que supone un descenso del 9 % respecto al mismo periodo del pasado año.
Esta corrección fue posible gracias al aumento de los ingresos públicos, del 6,5 %, que fue superior a la de los gastos, del 4,8 %, de acuerdo a los datos de ejecución presupuestaria publicados este miércoles por el Ministerio de Hacienda.
Como es habitual, la mayor parte del déficit se concentró en la Administración central con 17.478 millones -el 1,13 % del PIB y un 20,1 % menos- con un fuerte aumento de los gastos en remuneración de asalariados, intereses y gastos intermedios.
Las comunidades autónomas acumularon un déficit de 15.960 millones en la primera mitad del año, un 18 % más y un 1,03 % del PIB, ante el crecimiento de los gastos.
Todas las comunidades autónomas cerraron junio con déficit, que fue especialmente destacado en Baleares (2,09 % de su PIB), Murcia (1,81 %) y Extremadura (1,66 %).
Por lo que respecta a los fondos de la Seguridad Social, se anotaron un superávit de 3.674 millones -un 0,24 % del PIB y un 37,6 % más que hace un año- gracias tanto al aumento de las cotizaciones sociales como de las transferencias del Estado.
El Ministerio de Hacienda también ha avanzado los datos del Estado hasta julio, un periodo en el que acumuló un déficit de 42.010 millones de euros, un 9,8 % más y un 2,71 % del PIB, por el impacto de la liquidación del sistema de financiación autonómica (25.322 millones).
En los siete primeros meses del año el Estado ingresó 151.225 millones de euros, un 4,7 %, la mayor parte de ellos correspondientes a la recaudación tributaria (124.329 millones, el 6,9 % más).
El IRPF ingresó 34.325 millones, un 8,1 % más, a pesar del impacto negativo de la liquidación autonómica y de la reducción para rentas bajas; el IVA, 55.547 millones, un 7,1 % más, tras la recuperación de los impuestos eléctricos, y el impuesto de sociedades, 12.982 millones, un 5 % más.
Los gastos, por su parte, aumentaron un 5,7 %, hasta los 193.235 millones, debido tanto a la liquidación autonómica como a la revalorización salarial de los empleados públicos, aplicada con efecto retroactivo desde enero.
Así, el gasto en remuneración de los empleados aumentó un 3,9 %, una de las partidas que más crece junto a los consumos intermedios (3,3 %) y, sobre todo, los intereses de la deuda (14 %).