CARTAGENA. Demarcación de Costas ha autorizado a los dueños de la parcela donde se ubicaba el restaurante Katy, de Cabo de Palos, a su derribo, después de que el Ayuntamiento de Cartagena exigiera a los propietarios el pasado año que lo hicieran debido a que se encontraba en situación de ruina y suponía un riesgo para los transeúntes. Además, las quejas de los vecinos y de las asociaciones eran permanentes por lo explicado anteriormente, no solo la imagen deteriorada del edificio sino el peligro para todo aquel que pasaba a su lado.
En septiembre de 2021 se pidió a los propietarios que eliminaran las vigas que se habían desprendido y las que estaban en riesgo en la fachada. Asimismo, se exigió que limpiaran los escombros, apuntalaran las vigas del interior y que instalaran un vallado perimetral. Un mes después la Demarcación de Costas advertía de que había riesgo de derrumbe.
Entre enero y mayo del pasado año los servicios técnicos de Urbanismo volvieron a inspeccionar el local y comprobaron que las actuaciones que se habían adoptado no eran las que se habían exigido. Corroboraron que el edificio estaba en situación de ruina inminente. Dieron un plazo de 48 horas a los propietarios para que lo derribasen, aunque esta circunstancia no se dio porque se necesitaba la autorización de la Dirección General de Costas -ya que ocupa terreno marítimo-terrestre- para proceder a la ejecución de la demolición.
El trámite ha llegado en los últimos días -este mismo lunes era informado el departamento de Urbanismo del Ayuntamiento- pero han sido los dueños los que han actuado antes de que se decretase la demolición de forma subsidiaria.