VALÈNCIA. Lunes 21 de junio de 2021. Enrique Bañuelos se lanza a por la cotizada nórdica Inzile, que ese día cierra en las 46,10 coronas suecas por acción (4,32 euros al cambio actual), lo que arrojaba una capitalización entonces de unos 231 millones de euros. Justo un año después -y tras recibir el visto bueno de los accionistas para hacer se con ella a finales de septiembre pasado-, el fabricante de coches eléctricos se ha desplomado. Concretamente un 63% en el Nasdaq First North Growth Market del Nasdaq Nordic -lo que vendría a ser BME Growth- pasando a valer unos 85 millones de euros. Un precio propio de una 'small cap' o compañía de baja capitalización.
Una Inzile que venía de máximos históricos establecidos en enero de 2021, cuando llegó a tocar las 60 coronas suecas (SEK) o 5,62 euros por título. O lo que es lo mismo: seis veces más de las 10 SEK (0,94 euros) a las que partió en el parqué el 28 de junio de 2019. Cierto es que todavía se mantiene cómodamente por encima del precio de partida, pero no lo es menos -como se aprecia en el gráfico de YahooFinance- su marcha en bolsa en las últimas 52 semanas ha sido de más a menos. Sin ir más lejos a finales de septiembre de 2021 llegó a tocar mínimos históricos en los 12,74 SEK (1,20 euros).
Bien es cierto que en las últimas semanas la contratación de la firma presidida por Hakan Ortenholm se ha reducido notablemente, síntoma evidente de poca presión vendedora. En este sentido la media diaria de los últimos tres meses se sitúa en las 38.754 acciones. Volumen que rara vez viene superando en las últimas fechas. Sin ir más lejos ayer martes se intercambiaron de manos 18.710 títulos, el día anterior 9.932 y hace justo una semana apenas 7.174, es decir, la cifra más baja desde los pírricos 1.734 del pasado 25 de mayo.
Inzile, que está controlada en más de un 51% por QEV Electromobility -anteriormente eFashion Championship (eFC)-, propiedad del conocido empresario saguntino- remonta en lo que va de año en bolsa casi un 2%. Una subida que contrasta con el batacazo de casi un 70% que se pegó a lo largo de 2021... y buena parte del mismo por la dinámica bajista tras el anuncio de compra del fundador de la extinta Astroc. Conviene recordar que a lo largo de 2020, la sueca se catapultó un 335%.
Mientras tanto, la firma nórdica fundada en 2012 se encuentra actualmente en la ronda final con inversores para captar 30 millones de euros y, de este modo, ejecutar el plan estratégico 2022-2024, que pasa por potenciar la movilidad a través de los vehículos eléctricos como hypercars (bólidos eléctricos). Así lo ha constatado este diario de la base de datos pública del 'BME Growth sueco'.
Para ello el consejo de administración tiene un mandato de los accionistas para emitir nuevos títulos para dicha hoja de ruta. Asimismo, se halla en negociaciones finales con una serie de empresas -con importantes socios financieros- para construir nuevas plantas de ensamblaje, así como abrir delegaciones de ventas y marketing en ubicaciones estratégicas en todo el mundo.
Pinchar aquí para ver el gráfico más grande (Fuente: YahooFinance)
Entre los principales retos de dicho plan estratégico de la cotizada dirigida por Mans Sjostedt está una nueva plataforma de coches eléctricos (EVI) monovolúmenes, que lanzará en el cuarto trimestre de este año; varias fábricas en diferentes partes del planeta a partir de 2023; mayor número de unidades producidas; y relanzar una especie de Fórmula E -carreras de coches eléctricos-, campeonato promovido allá por agosto de 2012 por el propio Bañuelos y su socio Alejandro Agag. Cuatro años después el empresario saguntino vendió su participación en dicha competición, que rondaba el 25%, y dejaba de ser socio del marido de la hija de José María Aznar. La nueva competición que promueve el saguntino comenzará en febrero de 2024 donde los equipos estarán patrocinados por marcas de lujo de gama alta previamente seleccionadas y las carreras tendrán lugar durante ls principales semanas de la moda en Nueva York, Londres, París, Milán, Shanghái y Tokio.
Por otro lado, Inzile mantiene la apuesta por los hoteles y los resorts principalmente en tres áreas geográficas concretas: España, República Dominicana y las Islas Maldivas. Bañuelos ha encontrado un nicho de mercado para ofrecer sus vehículos eléctricos. Y más después de aliarse con el Grupo Piñero en septiembre pasado. Dicha empresa familiar con sede en Baleares pero de origen murciano (Mula) firmaba una alianza estratégica para ofrecer soluciones de movilidad sostenible basadas en la electromovilidad en el Caribe y Brasil. Su objetivo no es otro que dar respuesta a todos los servicios de movilidad necesarios en el sector hotelero: desde los transfers para el traslado de pasajeros a aeropuertos, hasta el transporte interno de los clientes dentro de un complejo o las excursiones y demás temas logísticos.
Por lo pronto, en marzo del ejercicio en curso recibía un pedido de 33 vehículos hoteleros y turísticos para el resort de lujo de cinco estrellas de Bahía Príncipe Cayo Levantado en la República Dominicana. Detrás de este establecimiento hotelero está precisamente el Grupo Piñero, cuyo encargo será entregado desde Emos Caribbean, la 'joint venture' formada por el grupo turístico y la empresa de movilidad eléctrica. La operación se repetía hace apenas dos semanas, cuando recibía un pedido récord de 900 vehículos para los hoteles y resorts de Emos Caribbean sobre la nueva plataforma eléctrica de la sueca para el mercado caribeño.
De ahí que esté preparando levantar una planta de montaje en la República Dominicana, que comenzará en el primer trimestre de 2023 con el fin de abastecer a la región. Todo ello en pos de seguir creando soluciones modernas de transporte y servicios para una comunidad sostenible. Una Inzile cuya visión pasa por liberar al mundo de la emisión de combustibles fósiles y acelerar los esfuerzos climáticos, contribuyendo así a ciudades sostenibles que mejoren la calidad de vida.