MURCIA. Un lujazo. Eso es lo que supone escuchar la música de Al Dual, un murciano del Barrio del Carmen por cuyas venas corre el rock and roll más puro y clásico, ese que huele a Memphis o a Nashville y que deja claro que detrás hay un rockero elegante, de los pies a la cabeza (un recorrido, por cierto, salteado por unos cuantos tatuajes). Así lo acreditaron los propios estadounidenses en los Premios Ameripolitan, que en 2018 lo encumbraron como el mejor artista masculino de rockabilly del mundo. El murciano es, sobre todo, un enamorado de la música en general y de sus raíces, algo que pone por delante del 'postureo' -que también mola, por qué negarlo- que lleva aparejada la imagen de todo rockero. Tanto es así, que ha compuesto algo tan diferente a lo que nos tiene acostumbrados como una banda sonora para el filme de terror Vampyr, que interpretará este sábado, 26 de marzo (21.30 horas), mientras se proyecta la película de Dreyer en la clausura del Festival de Cine Fantástico Europeo de Murcia, Sombra. Un lujazo, como decíamos.
Será con el acompañamiento de 'The strings of horror' y en formato de cuarteto de cuerda clásica, órgano y percusión como se podrá escuchar en la Filmoteca Regional este "experimento de música clásica tonal, que es como eran las bandas sonoras de las películas clásicas de terror de los años 30", según explica Alfonso Martínez Martínez (ya se pueden imaginar: Al viene de Alfonso y Dual por la repetición de su apellido). Se trata, apunta este músico murciano con una trayectoria de cine (nunca mejor dicho), de "70 minutos de banda sonora sobre la que hemos estado trabajando un año y medio". Y lo ha disfrutado, porque "siempre me han encantado los grandes compositores de música de terror y a veces he grabado cosas sin tener ningún encargo", cuenta este fan de filmes como Nosferatu o Noche de miedo.
No será la única visita que tiene prevista a Murcia el músico de rockabilly, que reside en Leganés (Madrid), ya que el 15 de mayo presentará en Garaje Beat Club su disco "más ecléctico", Reel To Reel, que ve la luz este viernes. Grabado en analógico y digital, tiene diez cortes en los que interpretan diferentes estilos, sin que falte, cómo no podía ser de otra forma, el rock and roll.
"Ser rockero es ser un poco la oveja negra en todos los sentidos y vivir la vida de manera distinta, como si fuera el último día; pero ya no es como antes, se puede ser un rockero y ser una persona ordenada. En mi caso, yo abogo más por hacer deporte, cuidarse y todo eso", asegura Al Dual, al que no le gustan nada frases del estilo "sexo, drogas y rock'n roll", porque "esa es una política que lleva a la destrucción". Este músico, en cuestión, cuenta que a las siete y media de la mañana "ya estoy tocando o componiendo, escribiendo letras o realizando labores de producción". Y a las once de la noche, si no tiene concierto, ya va siendo hora de acostarse. "Nosotros trabajamos en la noche, pero no hay que confundir el ocio y el trabajo", apunta.
Así de claro lo tiene este rockabilly, casado con la guitarrista de su banda, Mila Rodríguez, y con una niña de cinco años llamada Sue. Tan claro como que quería ser músico "ya desde pequeñito, cuando empecé con la guitarra". De hecho, por ahí andan algunas fotos de Alfonso con once años luciendo tupé. "Yo era el raro del grupo siempre. Al principio con el tupé y más adelante, con 16 años, comprando vinilos de Frank Sinatra, porque ya me gustaba el jazz, el swing... y claro la gente pensaba que estaba loco". "Solo me interesa la música", señala, al tiempo que añade que nunca perteneció a ninguno de los grupo de rockers que entonces había en la ciudad.
Actualmente, Al Dual dice encontrarse en "un buen momento, de tranquilidad, de composición, de saber lo que uno quiere", a lo que se añade que "la gira en salas con el proyecto de rock'n roll clásico está funcionando muy bien, con sold out en todos los conciertos. El público está respondiendo, tiene muchas ganas de pasarlo bien", piensa este murciano internacional a quien no sólo le ha gustado tocar, "también aportar algo e intentar llevar un poco más adelante lo que otros compositores dejaron antes".
De hecho, Al Dual explica que se queda con "la parte musical del rockabilly que tiene mucho que ver con las grandes orquestas que desaparecieron en los años 40 y 50 con la incursión del rock. Esos músicos se quedaron sin trabajo y se incorporaron a las bandas de rock'n roll clásicas. Yo me quedo con esa parte, con esos músicos de Bill Haley que venían de la orquesta de Benny Goodman, por ejemplo".
Al Dual podría haberse quedado en Estados Unidos, donde la música que él hace "es su folclore, como aquí el flamenco", señala; pero decidió volver a España tras unos periodos en el país de Elvis en los que conquistó ciudades como Los Ángeles, Las Vegas, Pomona, San Diego, Fullerton y Santa Clarita, entre otras, tocando en clubes míticos. "Hay ciudades como Nashville que giran alrededor de la música de raíz americana. ¡Una ciudad entera!", exclama.
Fue en este país donde recibió ese premio que "mediáticamente fue un punto y aparte en mi carrera, cambió todo bastante. Aunque yo no me fijo demasiado en los premios, he recibido muchos y al final no te llevan a ningún sitio. Lo que puede pasar, si no tienes los pies en suelo, es desestabilizarte un poco y creerte en un sitio que no te corresponde. Hay que tener cuidado con los premios. Yo me quedo con que nos han dado pie a seguir trabajando con ilusión", afirma con humildad. La misma que demuestra cuando dice que su mejor canción está aún por hacer.
Y la hará... porque no deja de trabajar, además de estar actualmente "muy inmerso en realizar producciones musicales para otros artistas, como Ana Duque y Los Daytonas". Y es que "el amor por la música es como un virus, no te puedes librar, incluso puede propiciar situaciones que están por encima de la familia y eso es peligroso". Aunque en su caso lo tiene más fácil al compartir esa pasión con su mujer.
De Al Dual se ha dicho que es un artesano que sabe rescatar fielmente sonidos procedentes de épocas primigenias de la música americana. Ha colaborado con grandes artistas de la talla de Paul Pigat, Chris Casello, Lisa Pankratz, Tommy Harkenrider, Chan Romero, Eddie Nichols, Mike Sanchez, Ron Felton, Sue Moreno, Chuck Onofrio, Ron Landis y Jan Jambers Menke, entre otros. Precursor de la guitarra rockabilly country en España (como también lo es fuera de nuestras fronteras), es uno de los artistas patrios con más reconocimiento en la internacional escena del rock'n'roll clásico.
Durante años de trabajo y afianzamiento de diversas técnicas, ha pasado a consolidarse como uno de los más completos guitarristas de este género, obteniendo un puesto en el olimpo de la guitarra Twang junto a músicos de la talla de Eddie Cochran, Bo Didley, Chet Atkins, o Duane Eddy con los que comparte un lugar privilegiado como endorser y embajador de la marca internacional Gretsch Guitars, instrumento paradigma de la guitarra Rockabilly y Western.
Ha grabado en los archiconocidos estudios Sun Records de Memphis, por donde pasaron Elvis Presley, Johnny Cash, Carl Perkins, Roy Orbison, Jerry Lee Lewis, B.B. King, Howlin' Wolf, Rufus Thomas, Junior Parker, Sonny Burguess, Billy Lee Riley, Warren Smith, Charlie Rich, Carl Mann y Charlie Feathers.