MURCIA. Ana Carrasco Gabarrón, la piloto ceheginera que ha regresado a la competición ocho meses después, se ha mostrado muy satisfecha con su retorno y, ocupando el séptimo puesto en el Mundial de Supersport 300, ha indicado que lo hecho en el circuito de Motorland Aragón "sabe muy bien después de todo" y que espera llegar "más fuerte" a la siguiente carrera.
Carrasco, de 24 años cumplidos el 10 de marzo, tomó parte en las dos primeras pruebas del campeonato celebradas en la localidad turolense de Alcañiz, siendo undécima en la primera de ellas y quinta en la segunda.
"¡Carrera muy luchada, pero nos vamos a casa con una quinta posición que sabe muy bien después de todo! ¡Ahora toca seguir trabajando todo lo posible para llegar más fuerte a la siguiente!", ha escrito en su cuenta oficial de Twitter.
Antes ya había valorado en su justa medida su reaparición al señalar que estaba contenta con "la toma de contacto de verdad en la batalla de SSP300".
La de Cehegín se ha sentido "físicamente bien y sabiendo que podemos estar en la pelea".
Cabe recordar que Carrasco, quien fue campeona del mundo en 2017 convirtiéndose entonces en la primera mujer que ganaba un Mundial compitiendo contra hombres, se fracturó dos vértebras en la caída que sufrió el 10 de septiembre del pasado año mientras entrenaba en Portugal y, después de un largo proceso de recuperación tras ser operada, ha vuelto a la competición demostrando que puede estar peleando por el título dando gas con su Kawasaki.
En Motorland Aragón los triunfos en la prueba de Supersport 300 se los llevaron el madrileño Adrián Huertas y el inglés Tom Booth-Amos, quien sale de Alcañiz como líder.
Carrasco, del equipo Provec, aparece séptima en la clasificación con 16 puntos, a 29 de Boooth-Amos y a 25 de Huertas.
En la tercera posición aparece el español Unai Orradre, con 33 puntos; en la cuarta el japonés Yuta Okaya, con 29; y en la quinta y en la sexta el francés Samuel di Sora y el brasileño Ton Kawakami, ambos con 19.
