MURCIA. La creativa Chari Cámara cree en las personas, en el empoderamiento colectivo y en que se puede hacer de este planeta un lugar mejor. "Yo trabajo por la gente", asegura esta 'arte educadora' alicantina que se vino para Murcia hace una década; y aquí se ha quedado. "Me encanta esta ciudad", dice, donde actualmente está realizando una residencia en los Laboratorios de Participación Ciudadana del Cuartel de Artillería -con su Mekiplay. La fábrica de juguetes- y desarrollando otro proyecto de arte participativo -Mapa- que ha sido seleccionado en los Reactivos Culturales del Ayuntamiento de Murcia. Ha llevado a cabo, además, unas de las actividades del Summer Cuartel -incluidas en la programación Murcia en Verano-, consistente en un paseo sensorial para conectar con el entorno.
Performance, arte relacional, ilustración, didáctica, arte textil o música son algunas de las muchas disciplina en las que trabaja esta artista, que aborda temas como la identidad, la autoterapia, los caminos de doble sentido y el movimiento. "Soy un culo inquieto", reconoce la alicantina, que hace tantas cosas que hay que ir por partes para no perderse, aunque en realidad todo forma parte de su tejido creativo. Así que empezaremos, por lo último, por ese paseo para los sentidos que tuvo lugar esta semana y que fue todo un éxito de participación.
Cuenta la arte educadora que lo primero que le dijo a los participantes es que "tenían que venir con piel de juego" para una actividad que comenzó en el Pabellón 1 de Cuartel de Artillería y luego se trasladó a la zona de Murcia Río. "La meta era activar comunitariamente la regeneración sensorial, la atención plena y el cuidado al medio ambiente, durante un recorrido en el que los sentidos fueron los protagonistas". Para ello, explica, adoptó la metodología del Shinrin Yoku (Baño del Bosque), una práctica que ella bautizó como Baño de huerta, "con muchos beneficios para el bienestar, ya que reduce los niveles de estrés, se desarrolla la sensibilidad y la relación con uno mismo y nos conecta a la naturaleza". Durante el paseo sensorial, también estuvo presente la música y algunas canciones interpretadas por la propia Chari (es cantante del grupo Silvestre Sonoro).
Esta actividad está relacionada con su proyecto de arte participativo Mapa, que ha sido escogido para el programa de Reactivos Culturales. Con él, lo que Chari Cámara pretende es "ayudar a generar una conciencia en cuanto al cuidado del medio ambiente y a la creación de 'colectivos de cuidados', que es un concepto que hemos creado para que la gente, incluso de forma autónoma, pueda detectar entornos de la ciudad y de la huerta con residuos o contaminados, para activar la regeneración de esos espacios". Para poder ayudarlos, "vamos a crear una guía ilustrada".
Por otro lado, y ya como residente del Cuartel de Artillería, la polifacética alicantina está en plena creación de su Fábrica de juguetes, fruto del trabajo que esta llevando como emprendedora durante los últimos cuatro años. "Mi concepto es generar encuentros de creación con la ciudadanía, crear prototipos nuevos de juegos para la marca y potenciar la participación en el cuidado del entorno". Así, y si el coronavirus no lo impide, en septiembre "todo apunta a que vamos a activar unos talleres para niños y adultos". Hay que señalar que el confinamiento no ha supuesto un parón para esta inquieta artista, ya que ha estado realizado vídeos sobre distintas actividades para el canal de YouTube del Ayuntamiento de Murcia.
A esta residencia artística, Chari ya llegó con un juego de mesa bajo el brazo llamado Wonderbox, enfocado a activar la creatividad y la sostenibilidad en grupo. Un producto que se puede adquirir en Libros Traperos, el Herbolario de la Plaza de las Flores y en el propio Cuartel de Artillería, informa Chari en su faceta de 'autónoma'.
Formada en Bellas Artes y tras entrar en contacto con las llamadas pedagogías invisibles, Chari Cámara asegura que "el arte conectado a la educación tiene mucho potencial en la realidad que estamos viviendo ahora. Yo entiendo mi trabajo como el de una persona que activa procesos de participación, de comunicación, de regeneración, a nivel sensorial y creativo. Es un papel de artivista, desde el arte y desde el activismo al mismo tiempo. Lo que quiero hacer con mis proyectos es dar un enfoque desde una marca, que al mismo tiempo representa a un colectivo de gente con unos valores".
No se puede hablar de Chari Cámara sin hacerlo también de Doctora Creativa, que es un alter ego de la creativa alicantina, del que habla en tercera persona. "Es mi marca personal, un personaje que creé para trabajar una enfermedad que pasé desde los 17 años, una colitis ulcerosa, de la que ya estoy bien". Explica que para la carrera tenían que hacer una cartografía personal y "yo decidí cartografiar mi enfermedad desde 2008, que me la diagnosticaron, hasta 2013. Y ahí descubrí a la Doctora". "Este personaje encarnaba la necesidad que tenía en ese momento de encontrar un rol para mi autocuración y una herramienta para cambiar los esquemas mentales", explica, al tiempo que señala que "he viajado mucho con ella para impartir talleres por toda España; con la doctora he hecho cantidad de cosas".
Así que, y por experiencia, Chari Cámara sabe que "el arte es una herramienta de sanación muy grande". "Yo trabajo por la gente y siento que transformo, sobre todo con la música", asegura esta artivista que no quiere acabar la charla sin hacer un especie de llamamiento: "Me gustaría que la gente sienta que estamos en un momento de empoderamiento colectivo, de conocer las cosas que tenemos que mejorar en nuestro día a día para que este planeta sea un lugar mejor para todos".
La trayectoria como artista de Chari Cámara arranca en Madrid, donde disfrutó de una beca SICUE/Séneca durante nueve meses. Ha realizado diversas exposiciones colectivas y varias performance, incluyendo Un Refugio Suspendido dentro del certamen Acción!MAD en Matadero. Colaboró en el proyecto Los Artistas Vuelven a Clase junto con muchos otros artistas alicantinos y su primera exposición individual fue Linea 6-Red social suburbana (2013), en su ciudad natal.