LORCA (EFE).- El ayuntamiento de Lorca ha iniciado la restauración de un gran espejo barroco de la colección del Palacio de Guevara de ocho metros cuadrados de superficie y más de 250 kilos de peso que en julio volverá a presidir el salón amarillo o salón de baile del edificio, considerado el principal exponente del barroco civil de la Región.
Las concejalas de Cultura y Desarrollo Local, Ángeles Mazuecos e Isabel Casalduero, respectivamente, han supervisado este lunes la restauración del espejo, que realizan en las dependencias de la escuela taller de ebanistería y restauración los dos profesores de la misma, Antonio García Rico y Manuel Mateo.
Mazuecos ha dicho que se trata de una pieza única en su género, de gran valor y que se encontraba muy deteriorada por el paso del tiempo, los xilófagos, los traslados y los terremotos del año 2011. Casalduero ha señalado que es un espejo tallado de madera de pino doncel, con profusa ornamentación dorada con pan de oro bruñido y en cuya parte superior se encuentra tallado en madera policromada el escudo de la familia Guevara.
Los expertos trabajan ahora en la reposición de volúmenes perdidos con madera tallada y posteriormente se procederá al dorado con oro de ley bruñido con piedra de ágata, aunque la pieza conservará el 75% de su dorado original.
El espejo fue encargado por la familia Guevara entre 1702 y 1703 a un taller especializado y tiene 3,44 metros de altura por 2,72 de anchura. Ha resaltado la carga alegórica del espejo, con una ornamentación muy del gusto de la época que enardece a la familia nobiliaria que lo encargó cuyo escudo aparece coronado y sostenido por un águila bicéfala.
El marco reproduce ángeles, flores, frutas y animales mitológicos como símbolos de la abundancia y de la grandeza de la familia. El 75% del mobiliario del palacio ha sido restaurado hasta ahora.