BARCELONA (EP). El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha dejado en el aire la mesa de diálogo entre el Ejecutivo catalán y el Gobierno central. La ha condicionado a lo que le plantee el presidente Pedro Sánchez en la reunión que está prevista para el 6 de febrero. Un planteamiento que después trasladará en una reunión a los partidos independentistas para valorar su opinión.
Su exigencia es que en esa mesa se negocie la autodeterminación y la amnistía de los presos condenados por el procés. "Necesito saber en qué condiciones negociaremos lo que sea necesario negociar, que es el ejercicio al derecho autodeterminación y la amnistía. Es el encargo que tenemos. No es una cuestión del presidente, es también de ERC y la CUP", ha destacado en una entrevista en Catalunya Ràdio recogida por Europa Press.
Según Torra, las negociaciones con el Gobierno deben hacerse con el acuerdo de todas las fuerzas independentistas, y ha preguntado a Sánchez qué propuesta le pondrá sobre la mesa.
"La pregunta no es qué le ofreceremos nosotros. El Estado debe hacerse preguntas", ha asegurado el presidente de la Generalitat, tras reivindicar que tienen en su favor la fuerza de la voluntad de los ciudadanos frente a los poderes del Estado y la Constitución.
En su opinión, no se puede abordar una negociación con el Gobierno sin unos acuerdos mínimos entre los independentistas, pero ha advertido de que no cree "que la movilización de tantos catalanes sea para negociar una reforma del Estatut".
"Si el Aran me pide un referéndum, yo pondré las urnas. Es una exigencia democrática, y lo que está en cuestión en este país es cuánta democracia está dispuesta a asumir el Estado", ha apuntado.
También ha explicado que no ha hablado con Sánchez para comunicarle la decisión de aprobar los Presupuestos de 2020 y convocar luego elecciones, y ha llamado a aprovechar los meses de legislatura que quedan para recomponer la "unidad".