VALÈNCIA. Prosegur (PSG) cerró este jueves bajando un 0,09% en bolsa en lo que fue la sexta caída en las últimas siete sesiones. Lo hizo para descender hasta los 2,172 euros, un 13,12% por debajo de los 2,50 euros del cierre del pasado 15 de septiembre, tal y como se aprecia en el gráfico de Investing. Sin embargo, a lo largo del presente ejercicio las acciones de la cotizada presidida -y controlada- por Helena Revoredo pierden un 38,55%, lo que ha reducido su capitalización bursátil hasta los 1.300 millones de euros.
Cierto es que la contratación no está siendo elevada y de hecho en pocas de las últimas sesiones ha logrado superar los 625.389 títulos de su media diaria anual, según los datos recabados por este diario de Infobolsa. Además, tampoco tiene en su accionariado ningún bajista con nombre y apellidos, por aquello de no igualar o superar el mínimo legal del 0,50% del capital de la multinacional líder del sector de la seguridad privada en España y uno de los principales operadores mundiales.
Una PSG que esta misma semana ganaba el contrato de Adif para la instalación de cámaras termográficas y de prestación de servicios de medición y control de temperatura de los viajeros en las estaciones de tren de Puerta de Atocha en Madrid y Barcelona Sants. Cierto es que fue la única oferta que recibió el administrador de infraestructuras ferroviarias español, valorada en 94.378 euros.
Por otro lado, PSG informó este jueves por el pertinente hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que la junta de accionistas aprobará previsiblemente el próximo 29 de octubre el reparto de 79 millones de euros en dividendos este año con cargo al ejercicio 2019, dividido en cuatro entregas de un 25% cada una.
En concreto, la distribución alcanza los 0,132 euros brutos por cada acción de la sociedad actualmente en circulación, de los que ya se han entregado 0,033 euros brutos el pasado 15 de enero y a los que siguieron otros pagos por la misma cantidad en abril y julio, quedando pendiente otro ingreso en octubre.
El pasado mes de abril, el consejo de administración de Prosegur ofreció a los accionistas la posibilidad de reinvertir en acciones de la sociedad el importe del dividendo a repartir el pasado 30 de abril, de 0,033 euros brutos por acción, con el propósito de minimizar la salida de caja. Se trata de una alternativa que, según explicó la empresa en ese momento, buscaba reforzar la posición financiera de la empresa ante la actual crisis generada por la pandemia de coronavirus, ya que, con arreglo a la normativa vigente, no podía suspender los dividendos restantes a cuenta del ejercicio 2019.
En ese caso, se trataba del segundo pago del dividendo aprobado ya el pasado mes de diciembre y al que seguían otros dos más en julio y octubre. Ante la imposibilidad de cancelarlos, la cotizada madrileña decidió lanzar un programa de reinversión en acciones de la sociedad, provenientes de autocartera.
Mientras tanto el mercado espera conocer los resultados de PSG correspondientes a los nueve primeros meses del año. Conviene recordar que a lo largo del primer semestre redujo su beneficio neto consolidado un 53,2% por el 'efecto coronavirus', hasta los 23 millones de euros tras descontar los intereses minoritarios.