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análisis

Echando un vistazo a la situación actual de los mercados (y las claves económicas)

El equipo de analistas de la entidad ofrece su visión sobre la marcha de los mercados y los obstáculos que se están encontrando

24/09/2020 - 

MADRID. Las bolsas de Estados Unidos acumulan tres semanas consecutivas de descensos, arrastradas principalmente por las acciones del sector tecnológico. Después de haber sido los valores con mejor comportamiento del mercado, en las últimas sesiones están perdiendo terreno.

En el otro lado del Atlántico, las bolsas europeas siguen manteniendo su tendencia lateral. Las negociaciones sobre el Brexit son cada vez más difíciles y se han complicado incluso más por una propuesta legislativa británica que vuelve a poner en el orden del día Irlanda del Norte. Las cifras macroeconómicas siguen recuperándose de los mínimos alcanzados durante el confinamiento, aunque avanzan a un ritmo más lento que en los meses anteriores.

Tendencia en las bolsas

Las acciones que han impulsado al mercado de valores de EE UU a alcanzar máximos históricos desde los mínimos que tocamos en marzo son ahora las que están empujando al S&P 500 a la baja. Así, las acciones de crecimiento como Facebook, Apple, Amazon, Microsoft, Alphabet/Google han sido  las más penalizadas en las últimas semanas. Por su parte, las acciones de sectores 'value' o de valor se han mantenido mucho más estables.

Como dato positivo señalar que se ha progresado en el desarrollo de una vacuna. Pfizer espera obtener una vacuna para finales de este año y hay una importante actividad de fusiones y adquisiciones. Nvidia y Arm Holdings, Gilead e Immunomedics, Oracle y ByteDance. Pero el sentimiento de los inversores se ha visto afectado por la falta de ampliación de las medidas de apoyo en el Congreso estadounidense y por la Reserva Federal, que no acompañó el cambio de su objetivo de inflación con más medidas concretas.

Entre tanto, en Europa las bolsas se han mantenido relativamente estables y siguen fluctuando en torno al nivel de las últimas semanas. Sin embargo, Europa está registrando un aumento de los casos de coronavirus en muchos países y especialmente en Francia, España y Reino Unido, mientras que las cifras en Estados Unidos se han mantenido relativamente estables durante las últimas cuatro semanas. El número de muertes sigue siendo considerablemente menor que en la primera oleada de marzo y abril y, por consiguiente, las medidas siguen limitándose a restricciones locales.

Brexit

Las negociaciones entre la UE y Reino Unido siguen siendo muy complicadas. La situación se agravó aún más la semana pasada por la presentación en el Parlamento británico de un nuevo proyecto de ley del Gobierno sobre el mercado interior (Internal Market Bill), que permitiría a Reino Unido renunciar a ciertas partes del Acuerdo de Retirada relativas a Irlanda del Norte y crearía una frontera dura de facto entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte. Esta decisión es vista sobre todo como una maniobra de los británicos para poner a prueba la determinación de los europeos. 

Mientras tanto, las negociaciones continúan, aunque sólo sea porque la UE no quiere ser la parte que rompa las conversaciones. Además, ambas partes confirman que todavía es posible llegar a un acuerdo. Puede que no sea un acuerdo amplio, sino más bien limitado. En este escenario, la libra esterlina se ha debilitado considerablemente frente al euro y ha vuelto a caer a la parte baja del rango en el que ha estado fluctuando desde el referéndum del Brexit en 2016.

Reuniones de bancos centrales sin cambios reales

En su primera reunión tras el anuncio de la redefinición de su objetivo de inflación (una inflación media del 2% durante un período indefinido), la Reserva Federal de Estados Unidos actualizó sus previsiones sobre el tipo de interés clave (el "gráfico de puntos"). Según el pronóstico promedio, los tipos deberían permanecer cercanos a cero hasta finales de 2023. La Reserva Federal no dio ninguna indicación sobre una posible extensión de su programa de compra de bonos. Esto, combinado con la postura cautelosa del banco central, ha llevado a una ligera decepción en los mercados.


El Banco Central Europeo, por su parte, muestra no estar en absoluto preocupado por la apreciación del euro y su impacto negativo en la inflación. El fortalecimiento del euro pesa sobre la inflación y, por lo tanto, anula algunos de los efectos de las medidas de estímulo monetario del organismo. Es muy probable que esta evolución haga aún más probable la ampliación del programa de compra de bonos previsto antes de finales de este año.

El banco central japonés también ha dejado su política sin cambios y se ha mostrado relativamente positivo sobre la situación económica. El sucesor de Shinzo Abe como primer ministro, Yoshihide Suga, sustituirá a dos miembros de la junta directiva del Banco de Japón (cuyos mandatos están llegando a su fin), probablemente con nuevos miembros que estén a favor de una política monetaria flexible en el curso del próximo año. Queda por ver si esto conducirá a tipos de interés más bajos.

Claves económicas

En la zona del euro, la producción industrial aumentó un 4,1% mensual en julio, continuando su recuperación desde los mínimos alcanzados durante el bloqueo. No obstante, el nivel de producción sigue estando más de un 7% por debajo de su nivel anterior al coronavirus, mientras que el ritmo de la recuperación también está empezando a disminuir.

En Estados Unidos, la producción industrial creció sólo un 0,4% mensual en agosto. Esta cifra se vio afectada negativamente por factores climáticos (el huracán Laura y la ola de calor). La industria manufacturera, que es más estable, subió un 1%, pero todavía está un 7% por debajo de su nivel de febrero. Las ventas al por menor aumentaron un 0,6% mensual en agosto, un poco menos de lo esperado. A diferencia de la producción industrial, las ventas ya están un 2% por encima de su nivel anterior a la crisis del Coronavirus. Cabe señalar, sin embargo, que las cifras de ventas al por menor no abarcan gastos como los relacionados con el turismo y el ocio, sectores que están siendo duramente castigados por la pandemia. La confianza de los consumidores (medida por la Universidad de Michigan) aumentó de 74,1 en agosto a 78,9 en septiembre. La mejora fue notable tanto en el índice que mide la situación actual como en el adelantado. Es importante señalar que el hecho de que no se hayan prorrogado las ayudas por desempleo desde principios de agosto no ha tenido un efecto significativo en las ventas al por menor ni en la confianza de los consumidores.

En China, hay cada vez más pruebas de que las consecuencias económicas de la crisis del coronavirus han sido digeridas. El crecimiento de la producción industrial se aceleró en agosto hasta alcanzar el 5,6% anual (en comparación con el 4,8% del mes anterior). Las ventas al por menor también alcanzaron un nivel más alto en agosto (+0,5%) que, en el año anterior, la primera cifra positiva desde la crisis de Covid.

Equipo de Análisis de Bank Degroof Petercam

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