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opinión

No hay que tomar decisiones en caliente en estos momentos en bolsa

El analista valenciano recomienda no dejarse llevar por las noticias cataclistas y mantener la calma... aunque cueste (y mucho)

17/03/2020 - 

VALÈNCIA. Dice Warren Buffett que "sólo cuando baja la marea se sabe quién nadaba desnudo". Y es que, en general, nos encontramos muy cómodos cuando la marea es alta o la bañera está llena. Sin embargo, cuando el agua baja, comienza a hacer frío.
Los mercados están sufriendo una de las caídas más pronunciadas de la historia. La inclinación de la pendiente da vértigo. El Ibex 35 ha sufrido la peor jornada de su historia cayendo un 14%. La bolsa sube despacito por las escaleras y baja tirándose desde el último piso sin paracaídas.

La volatilidad también ha incrementado por encima de los niveles de 2008. La situación general es de nerviosismo, inseguridad e incerteza. Como dijo Sergio Ramos antes de la semana más importante de la temporada para el Real Madrid: "Llega la semana de los tíos; a los niños hay que dejarlos a un lado". Pues bien, ha llegado el momento de ver quién tiene un plan consistente y es capaz de seguirlo y quién, o bien no lo tenía, o le pueden las emociones. Ha llegado el momento de los valientes, de los que se han preparado psicológicamente para este momento. 

Es ahora cuando los que han leído y aprendido mantienen la templanza, la hoja de ruta. Ahora vemos al que nadaba desnudo y al que se había preparado. Citaré de nuevo a Warren Buffet para añadir que "la bolsa es un mecanismo por el cual se transfiere dinero del impaciente al paciente". No hay que tomar decisiones en caliente, aunque nos apetezca hacerlo a cada noticia que leemos.

Si eres joven, enhorabuena, ahora harás aportaciones a precio de saldo con buenos retornos en el largo plazo. Si no eres tan joven y te ha pillado una caída, fuerte quizás tenga que revisar la distribución de activos.

Por terminar como empezamos, decir que las mareas bursátiles al igual que las del océano tienen ciclos. Las mareas económicas suelen subir durante periodos de 10 años en los que el inversor se confía, pero bajan muy rápido mostrando lo que hay debajo. 

Como el pavo que va ganando confianza mientras sus dueños le alimentan hasta que llega el día de acción de gracias. Mantener la calma y continuar el camino. Seguir nadando para llegar al destino.

Agustín Galbis es analista financiero

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