MADRID (EFE). Las restricciones de movilidad por el coronavirus pueden afectar también esta Navidad a la carga de juguetes que preparan Papá Noel y los Reyes Magos, ya que si aquellas se intensifican el sector teme una caída en las ventas de hasta un 5 % en comparación con la misma campaña de 2019.
Las ventas en Navidad pueden ser similares a las de 2019 si las restricciones de movilidad y de reunión por la pandemia no son excesivamente estrictas, según la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ).
En caso contrario, la patronal prevé un descenso en la facturación de hasta el citado 5 %, teniendo en cuenta que el sector ya ha acusado los efectos de la pandemia del coronavirus entre enero y noviembre, con una caída de la facturación del 9 % para el mercado español en tasa interanual.
El presidente de la AEFJ, José Antonio Pastor, ha comentado a EFE que, si no hay restricciones, "se podrá completar una comercialización más o menos normal" de los juguetes en el mercado nacional.
La ecuación de la patronal resuelve que a un menor número de familiares y amigos reunidos alrededor de una mesa, menos regalos y menor número de juguetes.
No obstante y como atenuantes, Pastor recuerda que la venta del juguete en España es muy estacional (se concentra en fechas determinadas) y que los papás y las mamás se privan antes de otros productos que de restar la "ilusión" a los hijos.
El sector afronta la campaña clave del año (en Navidad se factura el 50 % del total anual) pendiente de las restricciones para, al menos, terminar estas fechas en plano.
Pastor ha asegurado que "firmaba ya" por que el sector cierre la campaña navideña con una caída máxima del 5 %, apoyado según su relato en el "acelerón" del canal de internet para la compra de juguetes.
El canal "online" para la compra de juguetes duplicará a finales de año la cuota del 20 % obtenida en 2019, hasta el 40 % del total de las compras.
Pastor señala que en España este canal "iba creciendo con cifras importantes", pero matiza que, durante el confinamiento "ha experimentado un fuerte impulso".
La cuota del 40 % "nos acerca a la de otros mercados como Francia, Alemania o el Reino Unido antes de la pandemia", resalta.
Lo curioso de este crecimiento a juicio del presidente de la patronal es que antes, el canal por internet se usaba fundamentalmente para consultas, pero no para compras.
Las exportaciones por aduana (el 40 % de la facturación total, 600 millones de euros en 2019) y hasta septiembre, que es el último dato oficial con el que cuenta la AEFJ, el mercado ha descendido un 1 % en tasa interanual.
"Las exportaciones terminarán el año en positivo, entre un 3 % y un 5 %", avanza en una entrevista con EFE Pastor, quien recuerda que España es el segundo país productor de juguetes de la UE.
Argumenta que el descenso del consumo de algunos países clientes importantes "se ha compensado" con el aumento de consumo de otros países clientes con menores restricciones por la covid-19.
En el primer semestre del año y en los países en donde el confinamiento ha sido menor, el mercado del juguete ha crecido, con cifras de hasta un 20 % más, comenta.
Estados Unidos ha liderado en el tramo de año computado la importación del juguete español, seguido por el Reino Unido, Holanda, Alemania y Australia.
Pastor ha recordado que el Reino Unido se aprovisionó en agosto pasado y por el temor al brexit de juguetes españoles, con un crecimiento del 80 % en ese mes en comparación con agosto de 2019.
Los cálculos de la AEFJ apuntan a que el primer semestre de 2021 "será más duro" en materia de empleo. En ese tramo del año la patronal espera ajustes en las producciones y planes de reducciones "serias para la producción", lo que afectará al empleo.
En 2020, las fábricas han mantenido las plantillas "o con una reducción muy ligera", señala el presidente de la patronal, quien lo justifica porque el confinamiento "pilló en una época no crucial y recuperable" para el sector.
"Si en diciembre la cosa empeora puede pasar una factura importante en las tiendas y en el empleo", alerta sobre los comercios más tradicionales, de proximidad y menos digitalizados.
Además, la patronal señala como agravante que todas las ferias internacionales importantes del juguete se celebran en enero y febrero, por lo que asegura que en 2021 tendrán que desarrollarse de manera virtual.
"Esta circunstancia nos genera mucha incertidumbre y las empresas ante la incertidumbre, pliegan velas", apostilla.
