XEITO I ESPENTA / OPINIÓN

Error de cálculo

Los cálculos en política pueden traicionarte. El Gobierno, Sánchez y el PSOE estaban elaborando el duelo por la resaca madrileña cuando inopinadamente se encuentran con una crisis humanitaria y diplomática con su vecino del sur y con carácter internacional. Nervios, errores, subestimar al reino alauí y no tener la presencia exterior necesaria. EEUU apoya a Marruecos y la UE con la boca pequeña hace esfuerzos por ayudar. El caso es que Francia todavía no se ha pronunciado. Lo que diga será importante

23/05/2021 - 

MURCIA. La crisis con Marruecos. Guste o no guste, Mohamed VI es socio y aliado preferente de España. Por frontera, cercanía y porque nos suministra el gas que se consume mayoritariamente en nuestro país. Digamos que nuestro vecino del sur es peculiar, picajoso y complicado. La relación con Marruecos es siempre alambicada con episodios que se repiten cada equis tiempo. Nos queda un poco lejos lo de la 'marcha verde'; algo más cercano en el tiempo -pronto se cumplirán 20 años- el episodio de Perejil que por estrambótico no deja de ser sintomático. Entonces EEUU respaldó a España, ahora en plena crisis migratoria como consecuencia de haber recibido con la mediación de Argelia al líder del Frente Polisario para ser tratado de covid en La Rioja. 

"La diplomacia española queda en evidencia una vez más"

Intentar engañar al servicio secreto marroquí es una broma. Pasaporte falsificado, identidad doble, o sea, una trampa para entrar en España. Así que la diplomacia con el vecino debe ser siempre muy exquisita y contar con EEUU y la Unión Europea y en especial Francia. Aunque parece una crisis artificial por los movimientos marroquíes resulta que se ha puesto como escudo humano a miles de personas, menores incluidos, con imágenes brutales que ponen en duda la solidaridad y humanidad de Marruecos. Como siempre en estas circunstancias lo mejor son nuestro Ejército y las Fuerzas y Cuerpos y Seguridad del Estado, Cruz Roja y Ong que han ayudado y protegido. La diplomacia española queda en evidencia una vez más. Por no decir las chispas que saltaron entre Pedro Sánchez y Pablo Casado en el Congreso tras haber hablado previamente. No deberían olvidarse que se trata de un asunto de Estado. Acusarse y perder el tono no ayuda.

Las segundas dosis. De nuevo se genera desconcierto y se comete otro error de cálculo con la salud. Hasta hora las autoridades sanitarias seguían las indicaciones de la EMA (Agencia Europea del Medicamento), la OMS (Organización Mundial de la Salud) y numerosas sociedades médicas y científicas para aplicar las segundas dosis de las vacunas. Es decir, no se deben de mezclar distintas vacunas. Resulta que ahora se da carácter voluntario aunque con consentimiento firmado para aplicar Pfizer tras haber recibido una primera dosis de AstraZeneca. O sea, se cambia de criterio en mitad del partido. Esto afecta a los menores de 60 años pertenecientes a colectivos esenciales como son los profesores, policías, ejército... De nuevo, la sospecha de medidas ideológicas o atropelladas. 

El verano y la alegría turística. La desescalada rauda y veloz tras decaer el estado de alarma ha acelerado las previsiones turísticas. Según los operadores del sector, las reservas hoteleras y la compra de billetes de avión se han incrementado considerablemente. Se piensa que durante este verano podría haber un rebrote del turismo de más del 70%. Una de las claves será ver cómo afecta la prevención que el Reino Unido ha puesto sobre España. Son el primer emisor de turistas en nuestro país. De momento ha arrancado, aunque tímidamente, Fitur, una de las ferias del sector más importante. 

Las perspectivas parecen buenas. La necesidad económica es mucha y los ciudadanos tienen ganas de desconectar y dicen de gastar lo que han ahorrado en pandemia los que no han sufrido las consecuencias laborales y económicas. Se corre el riesgo de tomarlo con demasiada alegría porque aunque se mantienen restricciones ya se habla de flexibilizar el uso de las mascarillas. Habrá que ser prudentes.

El Tablero

PSOE: Pedro Sánchez, nervioso. Estando como estamos Iván Redondo y compañía tiran de prospectiva y planifican cómo será la España de 2050.  Con la que está cayendo se antoja un poco ciencia ficción. Aunque siempre es interesante trabajar a futuro. Encima José Félix Tezanos ya no le es tan fiel . El efecto Ayuso rompe sus cálculos y salen las cuentas que salen. Mientras Sánchez se afana en delimitar la Vicepresidencia de Yolanda Díaz, apostando por Nadia Calviño en la política económica. Se fue Pablo Iglesias, pero Unidas Podemos sigue en el Gobierno y hay que lidiar con ello. 

La fuerza del PSOE y Sánchez está en mantener la legislatura. Es su garantía. Las cuestiones partidarias como en el caso de Andalucía es un capítulo más para asentarse. Sería paradójico que Susana Díaz obtuviera ahora una victoria en su feudo. Sí que es verdad que el resultado madrileño ha despertado todas las alarmas y se adivina cierta crítica interna de los dirigentes autonómicos que ven algunas decisiones erráticas en asuntos como Ceuta y la pandemia.

PP: Pablo Casado, muy hiperactivo. Ha habido dudas de cómo afrontar la cuestión de Ceuta. Tras un tono duro, Casado intentó bajar el diapasón por la gravedad de las crisis humana y política. La efervescencia madrileña debería calmar la puesta en escena. Esta semana precisamente Isabel Díaz Ayuso apenas ha tenido visibilidad más allá de asuntos protocolarios, lo mismo ha ocurrido con otros líderes regionales, salvo el gallego Alberto Núñez Feijóo, que aprovecha como nadie cualquier resquicio para proclamar que el partido necesita una nueva definición más europea y centrada. Ya empiezan a ser un clásico sus admoniciones. Amaga y no confirma. Bien haría Casado en mirar por el retrovisor. Tiene un largo camino si quiere llegar a La Moncloa. Ayuso es su patrocinada y le ha dado un empujón. Veremos qué depara el futuro.

Vox: Santiago Abascal, sacando pecho militar. Ceuta es uno de los bastiones electorales de Vox. Abascal ha aprovechado la crisis para obtener réditos. Con un discurso agresivo y demasiado beligerante no ayuda, entorpece. La cuestión es lo suficientemente delicada como para decir según qué cosas. Extrañamente hay cierto silencio sobre cuál será su actitud ante la próxima elección de Díaz Ayuso como presidenta madrileña. La semana pasada Abascal amagó con pedir la Presidencia de la Asamblea madrileña. No se ha vuelto a saber nada, ni por parte de Vox, ni del PP.

Unidas Podemos: Entre Yolanda Díaz y Ione Belarra. Estamos en pleno interregno sin liderazgo. Mira que sabe mal no poder poner a un líder ya consolidado. Se nota la ausencia de Pablo Iglesias, retirado ya a sus cuarteles personales. El ex JEMAD Julio Rodríguez después de haber conseguido su acta de diputado -le ha costado unas cuantas intentonas-, abandona. Mejor dicho, ni recoge su acreditación, dice que por solidaridad con Iglesias que fue quien le implicó en el proyecto. La bicefalia que se avecina entre Díaz y Belarra que quiere guardar las esencias de Iglesias será curioso. Díaz es la clara amable y está en el Gobierno con mando en plaza.

Ciudadanos: el canto del cisne de Inés Arrimadas. Casi queda una o ninguna. Y la mención en femenino porque Arrimadas lidera el naufragio nacional y en Madrid es la vicealcaldesa Begoña Villacís. El shock es tal que Arrimadas aparece lo justo. Sus diez escaños en el Congreso ya casi son un drama. El día menos pensado se nos caen de este tablero. Las subvenciones económicas por acta ya no llegan y pasa lo mismo en Madrid. Es sabido que sin presupuesto es difícil continuar. Y nos digamos ya sin espacio político e ideológico que te han cooptado otros.

Las frases de la semana

Pablo Casado, presidente del PP: "El desencuentro con Marruecos es una crisis anunciada. A usted le queda grande Moncloa. Su gobierno es débil, déjese ayudar". ¡Como si estuviéramos a punto de elecciones. La cuestión es grave, pero el tono no era el adecuado!

Pedro Sánchez, presidente del Gobierno: "No me queda claro, ¿usted apoya al Gobierno o no? Usted es desleal con el Estado". ¡Lo mismo. Con un matiz, Sánchez es que gestiona y gobierna y es su responsabilidad este y todos los asuntos de Estado!

Santiago Abascal, presidente de Vox: "Esto no es una crisis migratoria, es una invasión". ¡Siempre ayudando y oportunista!

Pablo Pérez, portavoz del sindicato policial JUPOL: "Las medidas que hay que tomar en Ceuta no son policiales, son legislativas. Alguien tendría que hacer su trabajo". ¡Si lo dicen que están a pie del terreno, razón llevarán. En la política se pierden en ditirambos y palabros. Hay que gestionar!

Quique Bassat, epidemiólogo: "La EMA ya se pronunció. Hay que seguir administrando la segunda dosis de AstraZeneca". ¡La claridad de los expertos médicos. Son los que saben!

José Luis Martínez Almeida, alcalde de Madrid y portavoz del PP: "No se puede especular con la salud. Hay que escuchar a las autoridades sanitarias". ¡Lo dicho, médicos, científicos y no políticos!

Inés Arrimadas, presidenta de Ciudadanos: "No estamos preocupados por los resultados del CIS". ¡Pues menos mal. Es triste y difícil tener que gestionar el naufragio!

Rafael Simancas, portavoz del PSOE: "No contemplamos elecciones generales a corto plazo". ¡No me extraña. Estar a Moncloa sin ningún aspaviento es lo aconsejable. Contemplar adelanto electoral es un riesgo innecesario!

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