Asumiendo una pronta contención del brote es posible que el crecimiento económico global experimente una recuperación en V, señala el economista
MADRID. A medida que las autoridades Chinas se enfrentan a un coronavirus de rápida expansión, los inversores se preguntan por el impacto que pueda llegar a tener en el crecimiento económico global y en los mercados financieros. Aunque todavía hay muchas incógnitas acerca de la magnitud del brote (y lo que es más importante, acerca de su posible duración), las pérdidas iniciales en China y en otros mercados emergentes están empezando a hacerse notar.
La economía china ya crecía al ritmo más bajo de los últimos treinta años antes de que apareciesen los primeros informes del brote en la ciudad de Wuhan, en el centro de China. Desde entonces, el Gobierno chino ha sometido una docena de ciudades a cuarentena, ha cerrado escuelas y negocios, y ha restringido el tráfico en las regiones afectadas. Para comprender cómo el brote afecta a la economía global, hemos hablado con dos veteranos de la inversión de Capital Group que trabajan en Hong Kong, además de con uno de nuestros economistas de Estados Unidos. Aquí tenemos sus perspectivas:
Fuera de China, se espera que el principal impacto económico se note en Tailandia, que depende en gran medida del turismo chino. Entre la industria, los viajes y el turismo, es probable que la totalidad de Asia se resienta en gran medida, así como la venta de artículos de lujo, según explica Green. Además, muchas actividades asociadas al año nuevo lunar de China se han cancelado. Los valores en el mercado de la energía también han caído en picado, ya que los inversores esperan que el precio del petróleo siga bajando impulsado por la inferior demanda de China.
Desde que aumentaron las noticias acerca del virus, alrededor del 17 de enero, los valores de los mercados emergentes han bajado alrededor de un 4%, de acuerdo con el MSCI Emerging Markets IMI. Los valores chinos han descendido más de un 6%, y los tailandeses un 7%. Por el contrario, el MSCI World Index descendió un 1,3% durante el periodo comprendido hasta el 29 de enero. Si la economía y los mercados siguen deteriorándose, es posible que las autoridades chinas lancen nuevas medidas de estímulo, lo que incluiría posibles bajadas de impuestos y de tipos de interés.
¿Y qué pasa en Estados Unidos? Entre tanto, los valores estadounidenses han perdido alrededor de un 2% debido a la preocupación de que el brote pueda tener un efecto indirecto en la economía estadounidense, incluidas las empresas de Estados Unidos que hacen negocio en China. Starbucks ha cerrado casi la mitad de sus 4.300 establecimientos en China, muchas líneas aéreas de Estados Unidos han cancelado sus vuelos a este país, y además hay una preocupación creciente sobre la interrupción de la cadena de abastecimiento para compañías como Apple, que tiene allí importantes plantas de fabricación.
Si se añaden los recientes problemas de Boeing con el funcionamiento del 737 Max, la perspectiva para la economía estadounidense es ahora más incierta que hace unas semanas. El crecimiento del PIB anual del cuarto trimestre en Estados Unidos fue del 2,1% en base anual, de acuerdo con las cifras que el Departamento de Comercio publicó el jueves.
Si la producción del 737 Max continúa parada hasta julio, entonces calculo que el impacto sobre el crecimiento del PIB de la primera mitad del año será de aproximadamente -0,5 puntos porcentuales. El impacto económico del coronavirus en Estados Unidos es más difícil de medir, pero espero que sea limitado y que se note principalmente en la interrupción del comercio y en las relaciones financieras.
Asumiendo una pronta contención del brote es posible que el crecimiento económico global experimente una recuperación en V, caracterizada por un crecimiento más lento en la primera mitad, y una importante aceleración en la segunda mitad del año. Es probable que la economía de Estados Unidos siga este mismo camino.
Las bases de la economía estadounidense siguen siendo sólidas, el mercado de trabajo es resistentes y la Reserva Federal está lista para tomar cartas en el asunto en caso de necesidad. El coronavirus parece ser un impedimento moderado pero temporal para las actividades económicas de Estados Unidos, que las afectará a través de canales de impacto secundarios, pero no debería desviar mis expectativas de crecimiento de aproximadamente el 2% para el año 2020.»
El patrón es similar al que se vio con el brote de SRAS que afectó a China en 2002 y 2003: los indicadores clave se recuperaron rápidamente una vez que el virus se contuvo. Muchos inversores toman el caso de SRAS como una plantilla para predecir lo que puede ocurrir en las próximas semanas y meses, aunque es importante tener en cuenta que hubo muchos otros factores en aquel periodo, incluyendo las consecuencias de los ataques del 11 de septiembre y la guerra de Iraq en 2003.
Jared Franz es economista de Capital Group