La evolución de la tercera ola de la covid-19 y la lentitud en el proceso de vacunación nos hace mantenernos prudentes en nuestro posicionamiento
MADRID. Comenzamos el año con pequeñas correcciones en los principales índices de renta variable. A excepción del índice que agrupa la evolución de los países emergentes que se ha revalorizado un 3,7%, el resto de índices obtienen depreciaciones que van del -3,9% de Ibex 35 hasta el -0,35% del principal índice mundial (MSCI World). Por su parte, en la renta fija también ha sido un mes complicado, en el que únicamente resaltan en el lado positivo los bonos de alto rendimiento (high yield) que se revalorizaban un 0,13%.
Varios son los acontecimientos que han marcado la evolución de los mercados durante el mes de enero. En primer lugar destacar las reuniones de los principales bancos centrales. La reunión de la FED se saldó sin cambios ni en el precio del dinero ni en las compras de deuda que continuarán a un ritmo de 120.000 m$ mensuales. Por su parte, el BCE también mantuvo sin cambios su política monetaria. Aun así, durante su intervención, Lagarde aclaró que tienen sobre la mesa todas las herramientas necesarias para ampliar las ayudas económicas y que las utilizarán si es necesario.
A su vez, este mes conocimos el Informe de Perspectivas Globales del FMI donde el organismo revisó al alza las proyecciones de crecimiento mundial y se estima que crezca un 5,5% en 2021 y un 4,2% en 2022. En cuanto a Europa prevén que el crecimiento sea ligeramente inferior a lo esperado. El avance de la pandemia que está obligando a tomar medidas cada vez más restrictivas junto con un proceso de vacunación que avanza mas lento de lo esperado sugieren que el crecimiento podría ser más débil de lo proyectado.
Para finalizar, el mercado ha estado pendiente de la toma de posesión de Joe Biden como nuevo presidente de EE UU junto con la llegada de nuevos estímulos por parte de su Administración.
Aunque el escenario actual económico está sostenido en gran parte por los diversos programas monetarios de los principales bancos centrales, vemos cierta incertidumbre respecto a la evolución de la pandemia, la evolución de la tercera ola de la covid-19 con las nuevas cepas del virus y la lentitud en el proceso de vacunación lo que nos hace mantenernos prudentes en nuestro posicionamiento y por lo tanto no realizamos modificaciones en el mapa de activos RCI.
Consideramos por lo tanto, que nuestras carteras se encuentran bien posicionadas ante la situación actual, aun así seguimos realizando un continuo seguimiento tanto de la evolución de la pandemia como de los datos macroeconómicos y los resultados empresariales del cuarto trimestre del 2020 que estamos conociendo estas semanas.
Departamento de Análisis de atl Capital
Se trata de una decisión crítica para los planes de inversión a largo plazo, que afecta tanto a la renta variable como a la renta fija
El analista ofrece su visión sobre las reuniones del pasado mes de enero del Banco Central Europeo (BCE) y de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED)