Luis López Carrasco: “Sabíamos que estábamos poniendo la cámara donde nadie lo había hecho antes”
MURCIA. Este es El año del descubrimiento: el de la película documental que lleva este título y el de su director, el murciano Luis López Carrasco, que con su segundo largometraje en solitario -después del también aplaudido El futuro- está recorriendo, y en algunos casos ganando, los más importantes festivales internacionales de cine.
Ahora, a la película de López Carrasco le toca competir en la 21 edición del Festival Internacional de Cine Jeonju (Corea del Sur); en la sección oficial del Festival Internacional de Cine Thessaloniki International (Grecia); y en el Festival Internacional de Cine IndieLisboa 2020. Eso después de ganar el Gran Premio del prestigioso festival francés Cinéma du Réel y de ser nominado en el Festival Internacional de Cine de Rotterdam.
Estos festivales se celebrarán bajo unas condiciones especiales debido a la crisis sanitaria producida por la covid-19. Así, por ejemplo, el festival de Jeonju se llevará a cabo con un número mínimo de cineastas, miembros del jurado, prensa e industria, mientras que el de Thessaloniki se celebrará online. La película se estrenará en España en la Sección Oficial del Festival de Cine Europeo de Sevilla, que se celebrará de 6 al 14 de noviembre.
El año del descubrimiento está teniendo una excelente acogida por parte de la crítica nacional e internacional, convirtiéndose de esta forma en una de las mayores apuestas audiovisuales del año. Además de ganar el Gran Premio a mejor película en el Festival de Cine Documental Cinéma du Reél, también se llevó en este certamen el premio del Jurado de las Bibliotecas.
El año del descubrimiento es una producción de LaCima junto a Alina Film y cuenta con la ayuda del ICAA y el Ayuntamiento de Cartagena. Será distribuida en España por Begin Again Films.
Vecinos, jóvenes y desempleados charlan en el interior de un bar entre cigarrillos, desayunos y aperitivos. Recuerdan sueños insólitos, comparten preocupaciones laborales y proyectan planes de futuro. El bar se encuentra en Cartagena. Así es como comienza la película de Luis López Carrasco. A medida que avanza la jornada se escuchan, cada vez más cerca, los disturbios de la crisis industrial de 1992. Ese año se celebran en España dos eventos fundamentales: los juegos Olímpicos de Barcelona y la Exposición Universal de Sevilla, vinculada a la celebración del V Centenario del Descubrimiento de América.
Diez años después de la subida al poder de Felipe González, España aparece ante la comunidad internacional como un país efervescente, moderno y civilizado. Una futura potencia económica mundial. Sin embargo, en una ciudad de provincias del sudeste del país, las promesas por el cierre de fábricas y el desmantelamiento industrial adquieren una violencia creciente hasta acabar con el incendio del parlamento regional con cócteles molotov.
López Carrasco visita con esta película Cartagena para retomar los hechos que marcaron la historia reciente de la ciudad y que van unidos a diversos cambios laborales y económicos que suceden a escala global.