MURCIA. El sector del calzado en la Región ha recibido como agua de mayo la oportunidad de poder optar a las ayudas directas del Gobierno central, que canalizarán las comunidades autónomas y de las que quedaron totalmente excluidos en un principio. Pero la buena nueva queda ensombrecida por la preocupación que genera el pulso entre Europa y Estados Unidos por la denominada 'Tasa Google', que podría penalizar la exportación de calzado con un incremento en los aranceles, y que tiene sumido al sector en una profunda preocupación.
El BOE ha publicado este miércoles el real decreto-ley que permite a las comunidades autónomas extender las ayudas directas de 7.000 millones de euros a más sectores económicos de los inicialmente fijados. El decreto, aprobado por el Consejo de Ministros, concede de este modo más flexibilidad a las comunidades autónomas para incluir nuevos sectores afectados en sus territorios, como sería el caso del calzado o del vino.
"Ahora nos tocará convencer al Gobierno de Murcia, mostrando que el sector del calzado ha estado muy afectado por la crisis y merece ser beneficiario, ya que hemos sufrido la mayor caída en producción industrial, por encima incluso del textil", explicaba a Murcia Plaza Salvador Gómez, director ejecutivo de Calzia, la Asociación de Industrias del calzado del Noroeste de Murcia, y representante de la Federación de Industrias de Calzado Español, Fice.
Las empresas del calzado han estado luchando para que se les incluyera en el listado de los sectores beneficiados desde que se publicó el decreto y se quedaron fuera. "Esperamos que las ayudas lleguen a todas nuestras compañías que han tenido pérdidas de facturación importantes", deseó Gómez.
Pese a que esta modificación "abre una ventana de oportunidad para recibir las ayudas", el optimismo es moderado, ya que "habrá que esperar a que lleguen y ver en qué cantidad", añade el director ejecutivo de Calzia. Por otra parte, el conflicto entre Europa y Estados Unidos, que pone al sector en primera línea del fuego cruzado, está sumiendo a las empresas de la Región en una profunda preocupación.
Europa y Estados Unidos se encuentran en plena guerra comercial por la denominada 'Tasa Google', el impuesto a las empresas tecnológicas que se está impulsando desde varios países de la Unión Europea. Por su parte, Estados Unidos ha planteado responder a este impuesto con la subida de aranceles a diversos sectores, que en el caso del calzado pasaría del 10% actual hasta un 35%.
Aunque la aplicación de la tasa tecnológica está en pleno debate entre Estados Unidos y la OCDE, algunos países, como España, se han adelantado y ya la han aprobado, lo que ha propiciado que el país norteamericano haya abierto un proceso de sanciones a esos países concretos.
La situación está sumiendo en la incertidumbre al sector. "Conforme los clientes americanos han conocido esta situación, han paralizado los pedidos que tenían en marcha, sobre todo a empresas de la zona de Alicante y de la Región de Murcia, ya que si los aranceles se ponen en marcha, el pedido dejará de ser rentable", expone Salvador Gómez. Del mismo modo, empresas murcianas "estaban ya tramitando su presencia en ferias en Estados Unidos y ahora no saben qué hacer, si contratar el espacio o no, porque ese arancel extra hace imposible que un cliente norteamericano nos pueda comprar zapatos".
La Región lleva alrededor de tres décadas exportando calzado a Estados Unidos, pero el directivo de Calzia considera que "pasar de un arancel del 10% al 35% hará inviable que nuestros productos sean competitivos allí". Según estima Gómez, en el peor de los escenarios, "los clientes americanos van a comprar en otros países que no son España y eso va a afectar a las temporadas invierno 21-22 y verano 2022", además de que la situación podría "provocar una deslocalización definitiva de los grandes grupos de moda que vienen a producir en España", alerta el representante.
Por último, Gómez recuerda que el gigante norteamericano es un "mercado estratégico" con una excelente "expectativa de comportamiento", debido al éxito de la vacunación y al consumismo que lo caracteriza.
La Federación de Industrias del Calzado Español (Fice) ha pedido al Gobierno de la Nación que suspenda la 'Tasa Google' mientras se negocia con Estados Unidos en un marco más amplio, en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
"Tuvimos una reunión el lunes con la Secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, en la que nos mostró su máxima colaboración. Nos informó de que ellos tienen abierta la vía diplomática con Estados Unidos", expuso Salvador Gómez, quien agradece la intermediación, pero considera que "eso no resuelve el problema de las empresas" ya que, al haber una una expectativa de aranceles generada entre los clientes, el sector necesita "una comunicación expresa", que elimine la incertidumbre y frene las cancelaciones de pedidos presentes y futuras.
Los representantes del sector, entre los que se encuentra el directivo de la Asociación de Industrias del calzado del Noroeste, fueron asimismo recibidos por la portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados, Cuca Gamarra, quien "nos explicó la proposición no de ley que el PP ha presentado para que el Gobierno paralice la aplicación de la 'Tasa Google' hasta que se termine la negociación internacional", informó Gómez.
Por último, desde la Asociaciones empresariales se ha solicitado una reunión con las ministras de Hacienda y Asuntos Económicos, María Jesús Montero y Nadia Calviño, respectivamente, "para explicarles las consecuencias nefastas que tendría para las zonas donde está focalizado el sector" la elevación de los aranceles, ya que "son zonas que no tienen alternativas industriales, lo que empujaría a los trabajadores a un desempleo de larga duración", concluye Gómez.