MADRID (EFE/Sagrario Ortega). Unos 75.000 agentes vigilan cada jornada que se cumplan las medidas del estado de alarma y garantizan que puedan prestarse con seguridad los servicios esenciales. Para dirigir y supervisar su labor se reúne cada día el Centro de Coordinación Operativa (Cecor), constituido en el Ministerio del Interior.
Esa cifra tiene en cuenta los efectivos desplegados en turnos diurnos dentro del dispositivo para la vigilancia del estado de alarma. Pertenecen a la Policía Nacional, la Guardia Civil, los cuerpos autonómicos y los locales, a los que habría que añadir los agentes de la Seguridad Privada que están colaborando en algunas tareas, así como los de las Fuerzas Armadas.
Todos ellos coordinados por el Cecor Covid-19, con sede en el Ministerio del Interior y donde precisamente acudió ayer el rey Felipe VI para mantener una videoconferencia con los integrantes del centro, en esta ocasión tanto responsables políticos de las fuerzas y cuerpos de seguridad como los máximos mandos operativos.
Hasta el Cecor llegan todos las actuaciones realizadas por los agentes, que desde la entrada en vigor del confinamiento han elevado más de 575.000 propuestas de sanción por infringir las restricciones, según fuentes de Interior.
Los responsables de Interior han tenido donde mirarse. Las movilizaciones en Cataluña con motivo de la sentencia del procés del Tribunal Supremo, la cumbre del G-7 celebrada en la localidad francesa de Hendaya el pasado mes de agosto o la del Clima en Madrid desarrollada en diciembre requirieron la creación de sus respectivos Cecor, bancos de pruebas ahora del Cecor Covid-19.
Tres acontecimientos cuya coordinación en materia policial fue exitosa, como recalca a Efe José Antonio Rodríguez, director del Gabinete de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio.
Fue exitosa la colaboración de las fuerzas de seguridad del Estado y los Mossos d'Esquadra para controlar las violentas protestas que tuvieron lugar en Cataluña en octubre y, según las fuentes consultadas, un ejemplo de que si hay voluntad por parte de los responsables de las instituciones, la coordinación que la ciudadanía exige "funciona".
Aunque el G-7 de agosto pasado tuvo lugar en Francia, la proximidad de Hendaya con la frontera española hizo necesaria la participación de la Policía Nacional, de la Guardia Civil y de la Ertzaintza, incluidas en el centro de coordinación para ese evento. Los franceses felicitaron a los cuerpos españoles por su trabajo.
También la ONU alabó el dispositivo de seguridad de la Cumbre de Clima, montado en apenas 15 días y que también requirió coordinación policial a través de un Cecor instalado en el complejo policial de Canillas.
Es en el ámbito del Gabinete que dirige Rodríguez donde se ha constituido el Cecor Covid-19 para asegurar la coordinación permanente de las actuaciones de todas las fuerzas policiales y tomar de forma conjunta las decisiones pertinentes según vayan evolucionando los acontecimientos.
Todo ello, sin perjuicio de las órdenes que pueda dictar el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, la máxima autoridad de todos los cuerpos durante la pandemia, o el secretario del Estado de Seguridad, Rafael Pérez.
Ya el día 27 de febrero -explican las fuentes a EFE- la extensión del coroanvirus empezaba a complicarse y se mantuvo una primera reunión con la Policía Nacional y la Guardia Civil para preparar un plan de contingencia si Sanidad lo demandaba.
Se tenía claro que habría que constituir un Cecor, el que nadie hubiera querido crear porque nadie quería una crisis sanitaria de esta envergadura.
Cuando el 14 de marzo se decretó el estado de alarma, Marlaska asumió el mando de los cuerpos policiales y al día siguiente se difundió una orden con los criterios de actuación para todas las policías, centrados en las restricciones del decreto en materia de movilidad y en la seguridad que debía darse a los operadores de los servicios críticos y esenciales.
También centrada la orden en las medidas de apoyo para asegurar el abastecimiento y el transporte de mercancías.
Y para asegurar la coordinación, la orden creaba un Cecor central en el citado Gabinete y en el que están representadas todas las fuerzas de seguridad, las fuerzas armadas, el Ministerio de Transportes y la FEMP.
Asimismo, cada comunidad autónoma cuenta con un CECOR que preside el delegado del Gobierno y que reproduce el esquema del central. Los municipios también ha constituido comisiones de coordinación en el seno de sus juntas locales de seguridad. El día 15 de marzo Marlaska presidió la primera reunión por videoconferencia con los responsables políticos y operativos.
El Cecor ordinario, de carácter estrictamente operativo, se reúne todos los días en torno a las 19.00 horas, incluidos los fines de semana, aunque algunas veces se adelanta a las 12.30 horas.
Pero antes, desde las 6 de la mañana, todos los cuerpos policiales remiten al Gabinete de Coordinación y Estudios sus informes, con las novedades de las actuaciones, las peticiones de apoyo o refuerzo, partes de incidencias y otros datos operativos.
Una información que se analiza y se traslada al Cecor para que la evalúe y tenga en cuenta a la hora de hacer las previsiones del día siguiente.
El decreto de estado de alarma ha previsto 4 tipos de colaboración de las fuerzas armadas. La primera de ellas la desinfección de infraestructuras propias de Interior, como cárceles, cuarteles o comisarías, y de otras como mercados centrales, estaciones, residencias, etc.
También colaboran con las policías en la protección de infraestructuras críticas, como centrales nucleares, redes de comunicación, de abastecimiento de agua...., así como en el cierre de fronteras. Por último, participarían en patrullas mixtas de seguridad ciudadana, pero de momento no ha sido necesario ponerlas en marcha.
Las fuentes consultadas han insistido a Efe en que la coordinación operativa está funcionado "muy bien" y "no ha habido ninguna disfunción", ni siquiera en el ámbito político.
Reconocen que al principio se suscitaron algunas dudas de interpretación del decreto, pero desde el Cecor se aclararon.
Hasta el Cecor llegaron también las demandas de equipos de protección para los agentes ante las carencias detectadas. Ya han sido solventadas.