MURCIA. Carlos Alcaraz Garfia ya está en América, donde la semana que viene, en Canadá, iniciará la gira de torneos en pista dura que culminará con el Abierto de Estados Unidos, cuarto y último Grand Slam de la temporada. El joven tenista murciano, de 19 años y número 4 del mundo, afrontará los Masters 1.000 de Montreal y Cincinatti y luego el US Open habiendo ganado 12 de los 14 partidos que ha disputado en superficie rápida este año y 32 de los 44 que ha jugado en su carrera profesional.
Atrás ha quedado la hierba y la tierra batida y lo que a Alcaraz le espera es la pista dura de Norteamérica con el reto de superar lo hecho en 2021, cuando llegó a cuartos de final en Nueva York, y a comienzos de 2022 con el título brillantemente conquistado en el Masters 1.000 de Miami -se impuso en la final al noruego Casper Ruud por 7-5 y 6-4- y con las semifinales a las que llegó en Indian Wells, donde Rafa Nadal le privó de aspirar a llevarse el trofeo -el mallorquín el ganó por 6-4, 4-6 y 6-3 una semana antes-.
Jugar en superficie rápida le viene bien a Carlos por su juego agresivo, ese que le lleva a subir a la red a la primera ocasión que se le presenta. Quedó demostrado el pasado año en Flushing Meadows, donde maravilló al mundo llegando a cuartos de final con apenas 18 años y cayendo en esa ronda frente al canadiense Felix Auger Aliassime después de perder el primer set por 6-3 y abandonar en el segundo por lesión cuando iba 3-1 abajo.
En ese torneo, en el que fue sin duda el jugador revelación, dio la campanada logrando la primera victoria de repercusión mundial en su trayectoria en la élite, la lograda frente al griego Stefanos Tsitsipas, actual número 5 del mundo y que entonces era el 3.
La tierra batida es la superficie en la que más se ha desenvuelto Carlos, en la que más ha entrenado desde sus inicios y en la que más victorias ha conseguido, pero los resultados obtenidos en pista dura están casi a la par.
En arcilla el pupilo de Juan Carlos Ferrero presenta un bagaje de 27-4 este año, con lo que desde enero ha ganado el 87% de sus partidos en tierra y ese porcentaje se sitúa en el 85% en pista dura, con el 12-2 con el que se plantará en Montreal.
Desde que es profesional, la arcilla le ha dado al murciano un 78% de victorias (39 en 50 choques) y un 72% en superficie rápida (32 en 44).
En hierba su presencia ha sido mucho más reducida y ahí los guarismos arrojan un 3-1 a favor este año, es decir un 75% de triunfos; y un 4-2 en su carrera, lo que representa un 66% de victorias.
Queda claro que el de El Palmar se maneja bien en todos los terrenos y en cuanto a la pista dura, que es la que le tendrá ocupado durante las próximas semanas, se demuestra que tampoco es tan dura para él.