MURCIA. El Ministerio de Universidades ha publicado este mes los resultados del estudio sobre La salud mental en el estudiantado de las universidades españolas, que tiene como finalidad diagnosticar la salud mental de los alumnos y estimular políticas que beneficien su bienestar. La salud mental de los jóvenes universitarias se ha convertido en un tema de creciente preocupación. En los últimos años se han identificado bajos niveles de bienestar emocional de algunos sectores de la población, especialmente agravados por los efectos de la pandemia de la COVID-19, que plantean implicaciones preocupantes desde el punto de vista de la Salud Pública.
En todo este proceso consultivo y de análisis la Universidad de Alicante ha destacado por su elevada participación. La encuesta, dividida en dos fases, la contestaron un total de 4.739 estudiantes de la UA, lo que la sitúa entre las tres universidades españolas con mayor implicación. "Es importante señalar que se trata de un estudio cribado, no es diagnóstico, y que es necesario hacer un análisis en profundidad", señala Miguel Richart, el delegado de la rectora para la Unidad de Psicología y Resiliencia de la Universidad de Alicante.
Así, los resultados de este estudio en el que participaron los y las estudiantes de forma voluntaria "están mandando una alerta roja, una señal de que hay problemas", asegura Richart, con datos como que el 50% de los alumnos ha percibido la necesidad de apoyo psicológico por problemas de salud mental recientes durante el pasado cuatrimestre y que ha consultado alguna vez con algún profesional sanitario por un problema de salud mental. Además, el estudio ha desvelado que la prevalencia de ansiedad moderada o grave es de aproximadamente uno de cada dos estudiantes y que uno de cada cinco ha tenido pensamientos suicidas durante las dos semanas previas a la encuesta.
Es de destacar que, en las dos fases del estudio, las estudiantes de sexo femenino presentaron de forma significativa un mayor porcentaje de síntomas depresivos, ansiedad e insomnio clínico o grave y un porcentaje menor de consumo de riesgo de alcohol, comparadas con los estudiantes de sexo masculino.
Así mismo, el estudio incluye propuestas de mejora del bienestar emocional del estudiantado y la necesidad de que las universidades cuenten con servicios de prevención y orientación psicopedagógica y de fomento del bienestar en los campus. "En este sentido la Universidad de Alicante, inició desde el pasado mes de octubre un programa piloto de atención psicológica en el que han estado trabajando dos psicólogos y dos psicólogas", señala Miguel Richart, quien anuncia que a partir del curso próximo se consolidará este servicio, que estará ubicado en el Servicio de Prevención y Promoción de la salud bajo la dirección de su director, Miguel Ángel Sarabia, y el propio Richart.
El delegado de la rectora informa que, además, este servicio se complementará con otros recursos, como la organización de actividades formativas y culturales destinadas a mejorar el bienestar como talleres, musicoterapia, autocuidado o meditación, y que también está previsto ampliarlo en un futuro próximo con consultas 'online'.
En marzo de 2022, el Ministerio de Universidades y el Ministerio de Sanidad, a través de la Dirección General de Salud Pública, establecieron un grupo de trabajo interno, en el que han participado representantes de CRUE Universidades Españolas y del CEUNE, con el objetivo de realizar un diagnóstico detallado sobre la situación de la salud mental del estudiantado universitario en España. Un estudio que nace con el fin de tener una foto exhaustiva de este colectivo, en colaboración con el Centro de Salud Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM) y la cooperativa Aplica.
Se han realizado dos análisis, uno de carácter cuantitativo y otro cualitativo. Por un lado, el análisis cuantitativo tiene como fin el describir la prevalencia de los problemas de salud mental en el estudiantado de las universidades públicas y privadas españolas, para poder disponer de datos globales reales de la situación a día de hoy. Para ello, se han realizado dos encuestas a nivel nacional en dos periodos diferentes del calendario académico. La fase I se realizó del 2 de noviembre al 14 de diciembre 2022, mientras que la fase II se llevó a cabo del 12 abril al 22 de mayo 2023. En estas dos encuestas, se han incluido variables de interés (demográficas, aislamiento social, relacionadas con los estudios, razones subjetivas para el malestar, etc.), a través de la implementación de cuestionarios para el cribado de síntomas de ansiedad y depresión, abuso de alcohol y otras sustancias, pensamientos y conductas suicidas, entre otros.
Por otro lado, el estudio cualitativo ha tenido como objetivo identificar los recursos que contribuyen a mejorar las capacidades del estudiantado para tener buena salud y bienestar, además de mostrar las barreras que limitan dichas capacidades y las estrategias de mejora del bienestar emocional en el estudiantado universitario.
