MURCIA. Kluest está próxima a ser internacional. La plataforma que permite a todo el mundo crear experiencias en realidad aumentada de forma sencilla se está preparando para dar el salto fuera de las fronteras españolas, una aventura que comenzará en Portugal y que pretende alcanzar el mundo entero en 2024.
Para ello, el estudio murciano encargado de este proyecto, Sons of a Bit, ha cerrado una ronda de financiación por valor de 700.000 euros con inversores de relevancia tanto de España como de Estados Unidos. Entre ellos se encuentran Douglas Horn -que ha trabajado en empresa como Disney y Pokémon- y Ethan Frey, ambos referentes en el sector de tokenización y criptomonedas.
Asimismo, se ha apoyado tanto en la sociedad de inversión murciana Innoventures Capital, que les ha acercado a varios empresarios de la Región que han decidido colaborar, como con la consultora americana Zytech 123 especializada en blockchain, que les ha ayudado a conseguir sponsors fuera de nuestras fronteras.
En estos momentos Kluest mantiene operativa su beta abierta en España, una versión que en las próximas semanas llegará a Portugal y poco a poco se espera que alcance el resto de Europa. A partir de ahí, el siguiente gran objetivo será entrar en América para el 2024.
"Estados Unidos es el mercado más relevante a corto-medio plazo para nosotros porque lo que triunfa allí va llegando a todo occidente. De hecho, una parte importante de la ronda de financiación era para cubrir los gastos de la campaña de marketing que estamos preparando, porque si no allí es muy complicado triunfar", explica Eduardo Saldaña, cofundador de Sons of a Bit, en conversaciones con Murcia Plaza.
Más allá de occidente, la compañía también espera llegar próximamente a Corea del Sur y Japón, los que considera que son los dos mercados más fuertes en oriente, pues la legislación china hace que resulte muy complicado acceder a los potenciales consumidores de este país.
"Estamos creando algo muy grande. La gente habla del metaverso imaginando gafas de realidad virtual pero nosotros hacemos lo opuesto, sacamos la tecnología al mundo real como ya hizo Pokémon GO. Aquí lo que se encuentra el usuario son experiencias creadas, desde una búsqueda del tesoro hasta una galería de arte, por lo que los museos o los ayuntamientos pueden poner un contenido a disposición del usuario de una forma muy interesante para, por ejemplo, hacer turismo de forma independiente. Tiene un potencial muy grande porque los usuarios van a encontrar siempre contenidos alineados con sus intereses", concluye Saldaña.
