MURCIA. Lo primero que transmite la periodista y escritora Sònia Valiente (Valencia, 1975) es que está disfrutando a más no poder de todo lo bueno -que "está siendo mucho"- que le ha traído su primera novela, Veintitrés fotografías, publicada con Plaza & Janés. Una historia que aborda grandes temas, con un punto de thriller y de romanticismo, que la valenciana presentará este domingo en la Feria del Libro de Murcia (a las 19.00 horas firma de ejemplares en la casetas 60 y 61; y a las 20.30 presentación en el Pabellón 2 de Jaime I). Allí podrá encontrarse con unos lectores de los que, subraya, está recibiendo mucho cariño, que incluso visitan las localizaciones sobre las que escribe y que hasta se piden el mismo plato que la protagonista. "Me acuerdo perfectamente de la primera persona que me escribió tras leer mi libro y se me sigue poniendo la piel de gallina", asegura.
Y es que Veintitrés fotografías es más que una novela "ingeniosa y vibrante que late de vida entre tus dedos y con la que muchas personas se van a sentir identificadas", según la ha descrito Rosa Montero en una reseña. Es también la prueba de que "los sueños se cumplen", de que te puede publicar la misma editorial que también lo hace con Stephen King, Julia Navarro o Isabel Allende. Pero para eso "hay que creerse que se es escritor", apunta Valiente, que como buena periodista se define como "una devoradora de historias". Y esta no la podía dejar pasar.
"Leí una noticia en BBC News sobre el misterio de unas fotos de boda sin revelar encontradas en una cámara. Un señor compró una cámara por Internet, que tenía bicho, y reveló ese carrete. Era algo como muy universal y que me hizo plantearme qué le pudo llevar a ese hombre a viajar desde Bucarest a Reino Unido en busca de unas personas de las que no sabía nada", recuerda Sònia Valiente, quien pensó cómo sería, a partir de esta idea, desarrollar la historia en su Valencia natal. Cuenta que a continuación abrió una carpeta con un word en su ordenador con el nombre de 'Novela'. Ya no se podía echar atrás.
Tuvieron que pasar muchas cosas hasta que la novela tomó forma (incluida una pandemia) y entre ellas estuvo la asistencia a un curso de escritura con su gurú Rosa Montero, que Sònia Valiente le pidió a su marido como regalo de su sexto aniversario de bodas. "Fue como si en aquel momento me pusieran gafas. También, me sirvió para sentirme capaz. Porque en la escritura hay mucho de perseverancia, de sentarse seis horas al día, pero también de vencer prejuicios, de superar el síndrome de la impostora...", señala la autora, que es muy de refranes. Y para este momento tiene uno: "Cuando el discípulo está preparado, el maestro aparece".
Entre las muchas cosas que ha constatado la escritora -que ya se encuentra embarcada en su segunda novela e ideando la tercera- es que "cada libro es un pequeño milagro", con unos ritmos muy distintos a los que manejaba como periodista. Además, acostumbrada a comunicar sobre otros, está encantada de poder hablar de su novela. "Por primera vez en mi vida mi trabajo soy yo", señala, al tiempo que se muestra muy agradecida por "las personas tan bonitas que me estoy encontrando en el camino", como han sido Rosa Montero y Máximo Huertas, los dos 'padrinos' de Veintitrés fotografías que le han regalado una frase para la portada.
"Escribir esta novela ha sido un aprendizaje maravilloso para la vida", afirma una Sònia Valiente que, además de hacer honor al apellido, desprende optimismo y energía positiva, ya que afirma haberse encontrado "con mucha gente que me ha ayudado. Me están pasando cosas sorprendentes; está siendo algo muy luminoso".
La historia de Veintitrés fotografías está protagonizada por Sol, una publicista de treinta y ochos años en plena crisis laboral y sentimental. Un día, por impulso, compra una cámara analógica en el Rastro de Madrid. Cuando revela el carrete, descubre 23 fotografías que muestran la boda de una pareja (una está velada). Sintiendo que la llaman desde el pasado, se obsesiona con los novios y con un hombre misterioso que destaca entre los invitados. Sol todavía no sabe que la historia que encierran esas instantáneas dinamitará su vida por completo, ya que mientras busca respuestas también se tendrá que hacer muchas preguntas sobre ella misma.
Sònia Valiente señala que "con esta trama aparentemente entretenida, que tiene un poco de thriller y de amor, introduzco unas cargas de profundidad, ya que hablo de la importacia de encontrar tu lugar en el mundo, de la identidad... de grandes temas en los que radica la universalidad de la novela". En este sentido, recuerda las palabras de Rosa Montero que acompañan el libro sobre que muchas personas se sentirán identificadas con la protagonista. "Yo creo que todas somos un poco Sol, ya que en algún momento de la vida nos amontonamos y nos cuesta tomar decisiones", señala la autora.
Por su parte, Máximo Huertas ha escrito sobre la novela: "Todas las historias deberían tener una canción, un libro y una peli. Y ésta, los tiene". Al respecto, la autora considera que si tuviera que ponerle música a la novela sería un bolero -aunque si se trata de una canción sería Sin embargo de Sabina-.
Ahora, Sònia Valiente ya no puede parar de escribir -"es como si tuviera un géiser de palabras"- y anima a aquellos que no se atreven "a creerselo". Recuerda que el trabajo del escritor también está en discernir cuál de todas las novelas que tenemos en la cabeza merece la pena ser escrita. "Me daba miedo que después de esta historia que me ha salido de las tripas no hubiera más, pero afortunadamente sí que las hay".
Sònia Valiente (València, 1975) es periodista de formación y vocación. Licenciada en Publicidad y doctora cum laude en Comunicación, ha desarrollado su trayectoria profesional tanto en agencias como en medios de comunicación (RTVV, Mediaset, Vocento) siendo columnista de Las Provincias durante más de una década. Autora de diferentes libros de marketing y divulgación, Veintitrés fotografías es su primera novela con Plaza & Janés.