Así, el director general de Salud Pública y Adicciones, José Jesús Guillén, recuerda que "es fundamental intentar estar en zonas frescas y sombreadas y beber abundante agua para evitar la deshidratación y con ella calambres, lipotimias o colapsos".
"También se aconseja no abusar de bebidas con cafeína, alcohol o mucha azúcar, ya que pueden hacer que se pierda más líquido corporal, y, por supuesto, no practicar actividad física intensa en el exterior en horas centrales del día", ha explicado Guillén.
Comidas ligeras y atención a los síntomas
Además, desde Salud Pública se recuerda a la población la necesidad de prestar especial atención a las personas mayores, enfermos y dependientes, especialmente si toman medicamentos para el sistema nervioso o el aparato circulatorio, o cuyas condiciones de salud puedan agravarse por las altas temperaturas. Asimismo, hay que mantener las medicinas en lugares frescos porque el calor puede alterar su composición y efectos.
Tanto en el caso de los niños como de las personas mayores es necesario ofrecerles agua de manera habitual, aunque no presenten sed, para evitar la deshidratación.
Otro consejo que se ofrece desde la Consejería es hacer comidas ligeras durante estos días que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor, como ensaladas, frutas, verduras y zumos, además de usar ropa ligera, holgada y que deje transpirar.
Salud recuerda que si hay síntomas que se prolonguen más de una hora se debe consultar con un médico para evitar consecuencias graves.