MURCIA. El de las residencias de mayores ha sido uno de los sectores que más ha sufrido la pandemia del coronavirus, por el carácter vulnerable de sus usuarios. Asimismo, las restricciones impuestas por la Administración para atajar la pandemia han impactado también en el plano económico, dado que durante 2020 no se produjeron nuevos ingresos. Pese a ello, Gerocentros del Mediterráneo, uno de los principales grupos de residencias que opera en la Comunidad Valenciana (propiedad del Grupo Fuertes, de la alicantina Cívica y del oriolano Domingo Alcocer), superó el ejercicio 2020 con una caída de apenas el 5% de su volumen de negocio y logró anotarse un beneficio más discreto que el año anterior.
Las cuentas anuales consolidadas del grupo alicantino-murciano, que opera con la marca Savia, recogen una facturación de 46,5 millones de euros en 2020, un 5% menos que el ejercicio anterior (sin pandemia), cuando fue de 49,3 millones de euros. Un retroceso que, combinado con un mayor esfuerzo en los gastos de personal (que se incrementaron en cerca de un millón de euros hasta los 29,5 millones) recortó un 40% el resultado de explotación hasta 5,3 millones, y se trasladó directamente al resultado del ejercicio: Gerocentros ganó 3,78 millones, un 40% menos que en 2019 (6,48 millones).
Pese al impacto de la pandemia, la dirección del grupo de residencias impulsado en su día por la familia Cotino (que lleva años fuera del accionariado, controlado ahora por el dueño de El Pozo y el grupo de la familia de Enrique Ortiz) completó un ejercicio satisfactorio dadas las circunstancias, que eso sí, deja al grupo con un fondo de maniobra negativo. Situación que esperan revertir si se mantiene la línea de resultados positivos que inició Gerocentros en 2012, cuando salió de pérdidas por primera vez desde su fundación. En este sentido, el plan de negocio prevé Ebitdas positivos tanto para el ejercicio 2021 como para los siguientes, y el grupo formalizó en 2019 una línea para financiar la actividad.
Al cierre del ejercicio 2020, el grupo de residencias cuenta con un total de 1.974 plazas concertadas con la Conselleria de Igualdad, lo que equivale al 74,5% del total de plazas gestionadas por las resicencias Savia, según refleja el informe de gestión adjunto a las cuentas. En 2019, Gerocentros se adjudicó 377 nuevas plazas concertadas (del total de 1.500 puestas a disposición por la Conselleria), de las cuales 92 venían a cubrir plazas ya vencidas del contrato inicial firmado en 2001. Dicho contrato vence en principio en noviembre de 2021, aunque se puede prorrogar por dos años. En cuanto a la plantilla, el grupo incrementó ligeramente el personal durante 2020, hasta finalizar el ejercicio con 1.286 trabajadores de media.
Por otra parte, el informe de gestión destaca que a la fecha de formulación de las cuentas anuales (el pasado marzo), "la totalidad de los centros que gestiona el grupo han recibido la vacuna, tanto los residentes como los empleados, habiéndose reanudado los ingresos en los centros residenciales con normalidad", motivo por el cual las perspectivas para el ejercicio 2021 son favorables. Aunque el grupo asume que la crisis sanitaria de la covid-19 sigue estando presente, "se espera que su impacto a futuro sea limitado dependiendo de la evolución y remisión de la pandemia en los próximos meses".