Antonio Mestre, director e la refinería Repsol CartagenaCARTAGENA. Repsol invertirá 75 millones de euros y empleará a 1.200 personas -con picos de 2.000 personas al día- en la parada de las unidades de Conversión e Hidrotratamiento, en lo que será la mayor actuación de este tipo de la historia de la refinería de Cartagena. Para ello, se invertirán 40 millones en el mantenimiento y 35 millones en las nuevas inversiones, de los que 25 están destinados para eficiencia energética. Se conseguirá, por tanto, una reducción de emisiones cercana a las 68.000 toneladas/año de Co2.
La parada se lleva a cabo para garantizar la seguridad en el próximo ciclo de funcionamiento de las unidades, a la vez que mejorar la fiabilidad de los activos implicados en los procesos y "para invertir en gestión de eficiencia energética. A finales de 2019 nuestro consejero Delegado anunció que Repsol sería en 2050 una compañía de cero emisiones netas de Co2, pero para ello tenemos que empezar ya a trabajar, de ahí que en esta parada haya inversiones que están directamente focalizadas a ese objetivo de emisiones", explicaba Antonio Mestre Gómez, director de la refinería de Repsol en Cartagena.
La reducción prevista -68.000 toneladas/año de Co2-, explicaba Mestre, es a modo de ejemplo, "el Co2 que sería capaz de absorber un bosque con una extensión de más de 13.000 campos de fútbol".
Se intervendrá en 450 equipos, de los que hay 232 cambiadores de calor, 22 reactores, 200 depósitos y más de 1.500 válvulas. La duración de la parada en esta fase de ejecución, recordemos la más larga de la historia de la refinería, será de 50 días aproximadamente y arranca este fin de semana. A las 380 personas de Repsol que intervendrán en la parada, hay que añadir 1.200 personas al día, unas 500.000 horas/trabajador, procedentes de empresas auxiliares.
Para ello se ha contratado todos en estos trabajos con 60 firmas, de las que 35 son locales -Cartagena y Región- , a través de 90 contratos, de los que el 63% han sido adjudicados a estas empresas locales. "Es predominante la empleabilidad de las firmas locales", indicaba el director de la refinería.
El único y principal objetivo "top" de esta parada, decía Mestre, es la seguridad. "Que esas 1.200 empresas contratistas y todos nuestros operarios salgan de aquí todos los días conforme han llegado, sanos y salvos. No queremos ni un solo accidente durante la parada". Para ello, han puesto en marcha un equipo de seguridad y medio ambiente, que se encargará de velar porque se cumplen con todas las normas "está formado por 35 personas propias con todos los técnicos de seguridad de las contratistas", además de equipos de rescate y de diseño y supervisión de maniobras, con trabajos en altura.
Repsol "sigue siendo un motor económico y social en la Región de Murcia. Esta industria sigue dando ese valor" y en ocasiones puntuales, como la parada que está a punto de comenzar, "supone un relanzamiento".
Recordaba Antonio Mestre que a comienzos de este año también se llevó a cabo una parada del Tren de Lubricantes, en el que se invirtió 15 millones de euros, lo que su8pone 90 millones en lo que va de año. "Si a esto le sumamos el proyecto del C-43, 188 millones de euros, -Repsol construirá en la ciudad la primera planta de biocombustibles avanzados de España- se pone de relieve que seguimos firmes con el compromiso de generar empleo de calidad y ser un motor económico".
