SAN MIGUEL DE SALINAS. Cinco meses y medio después de que la Conselleria iniciara la obras del derribo y construcción del puente Lo Quiles de la CV-95 a su paso por San Miguel de Salinas, la vía ha reabierto al tráfico. Se recupera así la infraestructura, que ha sido completamente reconstruida en una vía que es la principal conexión de la Vega Baja con el litoral desde Orihuela. Hasta ahora, debido a los trabajos de reconstrucción, había que realizar un desvío de dos kilómetros por la ronda de San Miguel, con los problemas de congestión del tráfico y ralentización de una vía con una gran afluencia de vehículos, sobre todo en verano, cuando ha estado cerrada al tráfico.
La Conselleria inicio los trabajos con una licitación de urgencia después de detectar serios problemas en la cimentación del puente tras una denuncia de la Asociación de Vecinos de San Miguel de Salinas, que ponía en riesgo la integridad del puente y, con ella, la de los usuarios de la CV-95. La reapertura de esta vía ha contado con la presencia del conseller de Infraestructuras, Vicente Martínez. La reconstrucción ha supuesto una inversión de 2,7 millones de euros. Tras la visita institucional, los operarios han procedido a reabrir el tráfico, en torno a las 13.30 horas.
Se ha demolido la totalidad del puente y se ha sustituido por una nueva infraestructura que ha servido también para rebajar ligeramente la pendiente de la carretera desde la rotonda que da acceso al puente desde Orihuela. Así, también ha servido para que la infraestructura pase de 40 a 50 metros de ancho. Desde el Consell han explicado que, con el fin de mantener la estética de la zona, que pese a tratarse de una rambla natural tiene previsto un gran desarrollo urbano en los alrededores, se ha mantenido la estética con un embellecedor que recuerda a los antiguos arcos de piedra.
El puente Lo Quiles fue construido en el siglo XIX con grandes sillares de piedra como principal atractivo histórico. El gran tránsito de vehículos, las sucesivas ampliaciones de la calzada y el desgaste provocado por el agua de la propia rambla, acabaron dañando su estructura. Sin embargo, durante la obra, que ha ejecutado Pavasal, se han recuperado parte de estos sillares de piedra con los que se reconstruirá uno de los arcos del puente junto a la carretera, en la rambla, para disfrute de todos los vecinos y como recuerdo de esta infraestructura, han explicado desde la Conselleria.
Esta actuación se ejecutará posteriormente, pues lo importante, explican desde la Conselleria, era recuperar el puente y reabrir el tráfico lo antes posible, al tratarse de una de las arterias principales de la comarca que ha estado todo este tiempo cerrada al tráfico.