MURCIA (EFE). El fiscal ha pedido cinco años de prisión y multa de 1.620 euros para un hombre que va a ser juzgado la próxima semana en la Audiencia Provincial de Murcia acusado de apropiarse indebidamente de un total de 67.000 euros de la empresa en la que comenzó a trabajar como comercial y de la que llegó a ser director general.
Las conclusiones provisionales de la fiscalía, a las que ha tenido acceso Efe, señalan que el acusado, H.C., para realizar su trabajo, recibió un teléfono móvil, una tableta, un ordenador y un vehículo, junto con varias tarjetas de crédito.
Y añade que al observar la empresa "numerosas irregularidades en la utilización de las tarjetas, con extracciones en metálico y pago de facturas con fines exclusivamente particulares", fue despedido, lo que ocurrió en julio de 2014, al tiempo que se le requería la entrega de los objetos que había recibido.
Según la acusación estatal, se apropió, presuntamente, de la cantidad cuya devolución ahora se le reclama, además de cargar a la empresa los gastos de reparación de su vivienda.
El ministerio público reclama a la sala que lo condene a las penas de prisión y multa y a indemnizar con la suma presuntamente apropiada, junto con el valor en que se tase el móvil, el ordenador y la tableta, que afirma que no devolvió, junto con el importe pagado por las reformas de la casa.