MURCIA. No es un secreto que la Región siempre ha ido a la cabeza en la optimización de los recursos hídricos. Su posición geográfica, así como su trayectoria agrícola, la han llevado a impulsar grandes mejoras en las técnicas de empleo del agua en los cultivos. Siguiendo esta estela, la murciana OTK se encuentra ultimando su proyecto de modernización del regadío de 2.500 hectáreas en El Ejido (Almería) con aguas no convencionales.
La instalación agrícola, que será desarrollada en esta zona de referente para la agricultura mundial, se caracteriza por la innovación en tren grandes áreas: la reducción de emisiones, la digitalización y el aprovechamiento de aguas con mayor salinidad, siendo este último el principal objetivo del proyecto.
En específico, se trata de recursos hídricos que pueden ser adaptados para su utilización en el regadío mediante la desalación. Aunque la utilización de agua desalada no es ninguna novedad en la agricultura, sí resulta de interés los mecanismos que está desarrollando OTK para alcanzar un residuo cero. Para conseguirlo, han logrado transformar la salmuera restante en materias primas a través de un proceso de cristalización, lo que permite su reutilización en diferentes usos industriales.
"Se planteó en un primer momento utilizar la sal seca que queda en las desaladoras para las carreteras, y más tarde como material de construcción. Ahora hemos encontrado la forma de convertir estos residuos en un subproducto valorizable, lo que también reduce el impacto en el medio ambiente. De hecho, ya estamos empezando a introducir esta tecnología en las granjas para remediar la contaminación que producen los purines. De momento, los ensayos están funcionando", según explica a Murcia plaza el director general de OTK, Emilio Cobos.
Por otro lado, también el tratamiento de la información que se hará en estas instalaciones resulta novedoso. Será una plataforma digital la encargada de recoger, analizar y proponer decisiones, en función de los datos extraídos de los diferentes elementos que componen el proyecto, lo que permitirá a los agricultores la toma de decisiones adecuadas para un mejor rendimiento del cultivo.
En este sentido destaca la optimización del binomio agua/energía, pues se implementarán algoritmos matemáticos para descubrir cuándo es más adecuado emplear estos recursos. Además, permitirá una precisa simulación de escenarios, lo que se traduce en poder descubrir qué ocurriría si, por ejemplo, se reduce el riego en un 20%.
Asimismo, y para maximizar la reducción de emisiones contaminantes, este proyecto contará con la instalación de placas fotovoltaicas para autoconsumo, lo que disminuirá la huella de carbono de este proyecto en un 70% y reducirá los costes operativos.
Este proyecto ha sido preseleccionada en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) para la mejora de la eficiencia y sostenibilidad de los regadíos, en base a los criterios exigidos por la Unión Europea para ser beneficiario de los fondos de recuperación. Estos recursos económicos suponen una gran oportunidad para apostar por un cambio de modelo más eficaz y sostenible. La inversión total está valorada en 30 millones de euros.
En específico, el plan diseñado por OTK ha sido elegido por la Junta de Andalucía para ser llevado a cabo en El Ejido a beneficio de la Comunidad de Usuarios de Sierra de Gádor. La participación de la empresa murciana, que lleva ya tres años y medio dedicada a esta tarea, se encuentra cercana a su fin, pues Cobos opina que en unos seis meses ya podrán empezar a ejecutarse el proyecto.
‘European Green Deal’ es una nueva estrategia de crecimiento destinada a transformar la Unión Europea en una sociedad equitativa y próspera, con una economía moderna, eficiente en el uso de los recursos y competitiva, en la que no habrá emisiones netas de gases de efecto invernadero en 2050 y el crecimiento económico estará disociado del uso de los recursos. Todo ello supone un gran avance en sostenibilidad ambiental y en la mejora de la productividad agraria.