MADRID (EP). Un estudio del Grupo de Estudio del Sida (GeSIDA) de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) ha comprobado la viabilidad y eficacia de una estrategia de diagnóstico y tratamiento del virus de la inmunideficiencia humana (VIH) en personas vulnerables, logrando prevenir en un 97% de los casos que el virus pueda ser transmitido.
La estrategia de prueba, tratamiento y retención ha sido probada en personas vulnerables con VIH a través de equipos de calle y una unidad móvil, y ha incluido a 101 participantes, de los que el 86,1% eran varones, con una edad media de 34 años, predominantemente hispanos (73,3%).
Entre los participantes había un 63% que no tenía hogar, un 25% se encontraba en situación de calle, el 44 por ciento había tenido un consumo problemático de drogas en el último año, el 30 por ciento nunca había tomado tratamiento antirretroviral (TAR) y el 70 por ciento lo había interrumpido.
Los participantes iniciaron el TAR, basado en un único comprimido de BIC/FTC/TAF, el mismo día del diagnóstico y fueron seguidos durante 48 semanas, periodo en el que recibieron apoyo social para alentar la asistencia a las visitas de seguimiento y para recoger el tratamiento en las farmacias.
La tasa de retención en la semana 48 ha sido del 64,4%, y las principales razones de no retención fueron la pérdida de seguimiento (19,8%), la reubicación a otra ciudad (5,9%) y el encarcelamiento (5%).
Mientras tanto, la adherencia al TAR ha sido incompleta en el 57,3% de los participantes, y el 10,1% interrumpió el TAR más de 20 días al realizarse la visita médica; en el análisis de la última semana, el 96,9% de los pacientes alcanzó una carga viral por debajo de 50 copias por mililitro.
De ellos, dos pacientes habían interrumpido el TAR en el momento de su visita de la semana 48, y no se observaron fracasos virológicos durante el estudio; en el análisis multivariado, la adquisición del VIH a través del uso de drogas inyectables se asoció con una menor retención en la atención del VIH.
Aunque se ha informado de efectos adversos en el 68,3% de los pacientes, el 95,3% fue de intensidad leve y ninguno requirió la suspensión del tratamiento, que fue "ampliamente aceptado" y con más de un 95% de satisfacción notificada, incluyendo la facilidad de acceso, el apoyo del equipo de atención médica y la asistencia para la adherencia.
Los resultados del ensayo clínico 'SIMPLIFIED', presentados en el CROI 2025 de San Francisco (Estados Unidos), también han puesto de manifiesto que los nuevos modelos de atención del VIH deben enfatizar en el apoyo social para mejorar la retención en la atención de las personas más vulnerables, como aquellas diagnosticadas en el contexto de consumo de drogas inyectables.