MURCIA. La Consejería de Política Social, Familias e Igualdad ha lanzado una nueva convocatoria de ayudas destinada a que las pequeñas empresas de la Región —aquellas con entre 10 y 49 trabajadores— puedan elaborar e implantar sus propios planes de igualdad. Una iniciativa que busca combatir la discriminación por razón de género, prevenir el acoso sexual y favorecer la conciliación en compañías que, por su tamaño, no están obligadas legalmente a contar con este tipo de planes.
Las subvenciones, publicadas el pasado viernes en el Boletín Oficial de la Región de Murcia (BORM), están dotadas con un presupuesto total de 60.000 euros procedentes de fondos propios de la Comunidad. Cada organización beneficiaria podrá recibir 3.000 euros para financiar la puesta en marcha de su primer plan de igualdad. El plazo de solicitudes finaliza el viernes 21 de noviembre.
Desde el Gobierno regional destacan que esta línea de ayudas pretende fomentar “una cultura organizacional innovadora, sin diferencias salariales entre hombres y mujeres, en todas las empresas de la Región de Murcia”. Añaden que se trata de medidas con impacto social, ya que “promover su implantación en el mayor número posible de empresas contribuirá a construir un tejido empresarial más comprometido con la igualdad en todos sus ámbitos”.
Podrán optar a las ayudas aquellas compañías que hayan suscrito el compromiso de diseñar su primer plan de igualdad de manera voluntaria, tengan su domicilio social y fiscal en la Región y no estén obligadas a implantar uno por convenio colectivo.
El periodo de ejecución de los proyectos abarcará todo el año 2026, desde el 1 de enero al 31 de diciembre, e incluirá la elaboración del plan y la realización completa de al menos tres de las medidas que se recojan en él.
Una vez implantado el plan, las empresas podrán solicitar el Distintivo de Igualdad de la Región de Murcia (DIERM), un sello de excelencia que desde hace cinco años reconoce a las entidades comprometidas con la igualdad de oportunidades. Una treintena de empresas ya cuenta con este reconocimiento, que además de un diploma acreditativo puede mejorar la puntuación en futuras convocatorias de subvenciones que valoren las buenas prácticas en materia de igualdad.