MURCIA. Murcia encara el final del verano con varios proyectos de recuperación patrimonial en marcha. Algunos de ellos, como la Muralla de Sagasta o la Cárcel Vieja, empiezan a ser una realidad palpable. Otros, como la Ermita del Salitre, siguen dando pasos aunque todavía quedan fases clave por resolver. Y en el caso de San Esteban, el gran reto patrimonial de la ciudad, las promesas se acumulan desde hace más de una década a la espera de que, esta vez sí, arranque de manera definitiva.

La Cárcel Vieja

La rehabilitación de la Cárcel Vieja avanza y empieza a notarse sobre el terreno, pese a que el derribo de los muros perimetrales permanece bloqueado desde hace más de tres meses. En paralelo, se ha puesto en marcha un taller específico en el que restauradoras especializadas trabajan en la recuperación de más de 90 elementos originales del edificio.

El proyecto contempla la rehabilitación de espacios emblemáticos como los locutorios, donde se están recuperando seis módulos de cabinas de vis a vis y las mamparas de asistencia legal que utilizaban presos y abogados. Además, se están catalogando y restaurando materiales como tejas, ladrillos, pavimentos hidráulicos o piezas de cerrajería, con el objetivo de devolverlos a su lugar original una vez concluyan las obras.

La intervención va más allá de la recuperación arquitectónica: busca dar un nuevo uso cultural y ciudadano a un espacio marcado por la memoria histórica de la ciudad. En este sentido, la apertura de la cafetería el pasado mes de junio supuso un primer paso para devolver vida al recinto y abrirlo poco a poco a la ciudadanía.

La Ermita del Salitre

A principios de este año se anunció que la Ermita del Salitre de Murcia se transformará en un espacio expositivo y museístico que servirá como centro de interpretación de los Auroros de la Huerta. El proyecto avanza, pero todavía está pendiente de licitación, un paso clave que el Ayuntamiento confía en sacar adelante antes de final de año.

Uno de los hitos más importantes se produjo el 9 de octubre de 2024, cuando la capilla abrió sus puertas por primera vez en más de medio siglo. Esta reapertura permitió a los técnicos municipales evaluar el estado real del edificio y sentar las bases para la redacción del proyecto definitivo, actualmente en fase de elaboración.

En agosto se dio un nuevo paso con la adjudicación de un contrato menor, valorado en 6.897 euros, para realizar catas arqueológicas en la plaza donde se ubica la ermita. Estos trabajos de campo, que se pondrán en marcha a partir de septiembre, buscan evitar imprevistos antes de ejecutar la rebaja de la cota de la plaza y la ampliación de la zona peatonal alrededor del inmueble, una de las intervenciones previstas en el plan de recuperación.

El proyecto, dotado con una partida de 300.000 euros en los presupuestos municipales de 2025, plantea una actuación integral: recuperar la capilla —también conocida como la del Vía Crucis—, adaptarla como espacio expositivo, rebajar el entorno para dar mayor protagonismo al edificio y mejorar la accesibilidad del conjunto. Todo ello con la vista puesta en convertir este enclave en un referente cultural y patrimonial ligado a la tradición aurorera.

La Muralla de Sagasta

Tal y como se anunció a principios de año, la Muralla de Sagasta se podía visitar ya este verano. A principios de agosto se abrió al público y se confirmó que el nuevo espacio junto a la muralla medieval en la calle Sagasta será la sede permanente del Festival Murcia Tres Culturas. Esto permitirá que el festival deje de concentrarse únicamente en el mes de mayo y se proyecte durante todo el año.

La intervención ha supuesto una inversión municipal de más de 162.000 euros. Frente a la propuesta inicial de cortar parte del muro para facilitar el acceso, finalmente se optó por una solución más integradora: una escalera exterior paralela a la muralla y una pasarela metálica.

Proyectos que avanzan lentos

El Yacimiento de San Esteban

Han pasado ya más de quince años desde que el yacimiento de San Esteban salió a la luz a raíz del fallido proyecto de parking subterráneo. La aparición de los restos del arrabal andalusí, uno de los mejor conservados de Europa, frenó aquellas obras y puso en el centro de atención la necesidad de recuperar este espacio único en Murcia.

Desde entonces se han ido anunciando planes para poner en valor el yacimiento y construir un gran jardín que lo proteja, pero sin avances tangibles. De ahí que San Esteban sea visto como el gran proyecto pendiente de la ciudad, una promesa que ha atravesado varias legislaturas.

Sin embargo, en los últimos meses se han dado pasos concretos. En abril, el Ayuntamiento indicó que la licitación del proyecto de recuperación y construcción de la plaza estaba cerca y marcó como objetivo cerrar la adjudicación antes de que termine el año. El plan contempla una inversión de 33 millones de euros, financiada a tres bandas entre el Ministerio de Vivienda, la Comunidad Autónoma y el propio Consistorio.

De forma paralela, en mayo se licitaron los sondeos para el micropilotaje del nuevo jardín, con 59 de los 80 estudios arqueológicos previstos. Estos trabajos servirán para definir los puntos más adecuados donde levantar los pilares que sostendrán la futura plaza, garantizando al mismo tiempo la conservación de los restos.