MURCIA. Murcia avanza en su transformación con un proyecto clave para la movilidad metropolitana: la futura estación de autobuses soterrada junto a la estación de tren del Carmen, que ya tiene calendario y presupuesto. El proyecto de ejecución estará terminado a finales de este año y, una vez sea aprobado por la Sociedad Murcia Alta Velocidad, se sacará a licitación en 2026. A partir de ahí, las obras dispondrán de un plazo de 24 meses para completarse, con el objetivo de que la estación esté operativa a finales de 2028.

Así lo ha expresado el alcalde de Murcia, José Ballesta, durante la presentación del proyecto de la estación celebrado este lunes. La estación, que contará con una inversión global de unos 12 millones de euros, será la primera intermodal de la Región de Murcia y aspira a convertirse en "una de las principales puertas de entrada a la ciudad".

La futura terminal se situará a ocho metros bajo tierra, a la misma profundidad que los andenes del ferrocarril, y tendrá 18 dársenas frente a las 40 que ofrece actualmente la estación de San Andrés. Este cambio responde a un modelo más dinámico y eficiente, en el que los autobuses accederán a los andenes únicamente durante el tiempo necesario para recoger o dejar viajeros, con una rotación constante que optimiza el uso del espacio y mejora la fluidez del servicio.

El funcionamiento estará supervisado desde una sala de control, con un esquema similar al de un pequeño aeropuerto para coordinar las entradas y salidas de los vehículos. El consejero de Fomento e Infraestructuras, Jorge García Montoro, destacó además que la pérgola de la plaza de la Elíptica incorporará paneles fotovoltaicos para abastecer energéticamente parte del complejo y que la estación "estará plenamente conectada y ofrecerá todos los servicios necesarios a los viajeros".

La plaza de la Elíptica será el eje central de este nodo intermodal, un espacio urbano pensado para acoger la convivencia entre los diferentes medios de transporte —autobuses, trenes, tranvías y taxis— y facilitar el tránsito peatonal.

Sobre ella se levantará una gran pérgola que servirá como nexo visual y funcional entre la estación de autobuses y la ferroviaria, además de proporcionar sombra, luminosidad y un punto de referencia para los viajeros. El propio diseño de la plaza, con su carácter abierto y mediterráneo, pretende integrarse en la vida cotidiana de los vecinos del barrio del Carmen, respetando su historia y al mismo tiempo proyectando una imagen moderna de Murcia como ciudad accesible y sostenible.