MURCIA. El compromiso de Murcia con el bienestar de su comunidad educativa da un nuevo paso adelante. La Junta de Gobierno ha aprobado la licitación de un ambicioso contrato, valorado en 458.812 euros, para la instalación de 31 nuevos toldos en 29 Centros de Educación Infantil y Primaria (CEIP). Esta medida, enmarcada en el Plan Sombra, tiene como objetivo transformar los patios en espacios habitables y seguros durante todo el curso escolar, mitigando las altas temperaturas que caracterizan al clima mediterráneo.
La concejala de Educación y Atención a la Ciudadanía, Belén López, ha destacado que esta actuación no solo mejora las infraestructuras, sino que impacta directamente en la calidad de vida de unos 10.000 escolares. "Queremos que los patios sean lugares de aprovechamiento real, donde el alumnado pueda disfrutar del deporte y la convivencia sin las limitaciones que impone el sol extremo", ha subrayado la edil.
Un despliegue masivo en las pedanías
La estrategia tiene un marcado carácter territorial, ya que 27 de los 31 nuevos sombrajes se instalarán en colegios de pedanías, reforzando la apuesta por la equidad en los servicios públicos de todo el municipio. El plan prevé la instalación de dos tipos de estructuras: 18 toldos tipo vela, diseñados por su versatilidad estética y funcional, y 13 toldos tipo guía correderos, más robustos para grandes superficies.
Centros de gran capacidad, como el CEIP Pintor Pedro Cano y el Ciudad de la Paz, ambos en El Palmar, recibirán una atención especial con la instalación de cuatro toldos para cubrir sus amplias áreas de recreo. Además, la red se extiende por núcleos como Espinardo, Alquerías, Cabezo de Torres, La Alberca, Beniaján, Los Garres o Churra, entre otros, cubriendo prácticamente toda la geografía murciana.
Más de 7.000 metros de "refugio" escolar
Con esta nueva fase, el Ayuntamiento de Murcia alcanza una cifra récord en protección térmica escolar. Al sumar esta licitación a los 40 toldos que ya se instalaron para el inicio del curso 2025/26, el municipio contará con un total de 71 estructuras de sombra. En conjunto, estas infraestructuras generan más de 7.000 metros cuadrados de superficie protegida, beneficiando a cerca de 30.000 alumnos murcianos.
Detrás de cada instalación existe un trabajo técnico riguroso. El equipo de Construcciones Escolares de la Concejalía realiza estudios pormenorizados de orientación y soleamiento en cada centro para asegurar que la ubicación de los toldos sea la más eficaz. Gracias a esta estrategia de desestacionalización de las obras, el consistorio busca adelantarse a los meses de calor, garantizando que el derecho al juego y a la actividad física al aire libre no se vea interrumpido por las condiciones climáticas.