CARTAGENA. La nueva senda peatonal que integra las construcciones defensivas hasta Cala Cortina está a punto de abrir al público después de meses de obras. El vicepresidente de la Autoridad Portuaria de Cartagena - entidad que es la que ha llevado a cabo la intervención-, Pedro Pablo Hernández, prefiere ser cauto y no poner fecha para esta inauguración, aunque las obras están muy avanzadas y a lo largo de esta primavera los usuarios -peatones y ciclistas- podrán estrenar este nuevo recorrido de cerca de medio kilómetro. Esta actuación está enmarcada dentro del proyecto 'De Faro a Faro' y permitirá poner solución a uno de los problemas de accesibilidad que presentaba Cala Cortina y, al mismo tiempo, potenciar un entorno de alto valor patrimonial como son las antiguas Baterías de Costa.
Es un recorrido de 500 metros lineales hasta la playa urbana. De esta manera, los ciudadanos podrán divisar el entorno de las baterías de San Isidoro y Santa Florentina, así como las de Santa Ana y Santa Ana complementaria mientras pasean o realizan deporte.
El proyecto de la Autoridad Portuaria, en colaboración con el Ayuntamiento está a punto de culminarse. El objetivo de la senda peatonal hacia Cala Cortina es llevar a cabo una actuación de mejora del entorno, estableciendo otra opción de accesibilidad además de las escaleras de acceso hacia Cala Cortina.
Entre las actuaciones que se han llevado a cabo, se está mejorando la pavimentación, corrigiendo desniveles y colocando nuevos adoquines sobre una base de zahorra artificial. También se renovarán las talanqueras, es decir, las protecciones de terraplenes, y se reforzará la iluminación.
Asimismo, la zona contará con un sistema de vídeo vigilancia para controlar y actuar ante posibles actos vandálicos en la zona. Los trabajos también incluirán la plantación de vegetación, concretamente mil ejemplares, así como un nuevo tramo de acera, para conectar directamente la senda con Cala Cortina. Se trata de un proyecto sostenible, ya que se ha usado plástico reciclado para elementos como papeleras, mobiliario o cartelería, entre otros.
Principalmente, se potenciará la seguridad de la zona con la renovación de las talanqueras de madera que se encontraban deterioradas y con la mejora de la iluminación durante todo el itinerario para otorgar una mayor visibilidad.
Destaca además la instalación de un sofisticado sistema de videovigilancia que ayudará a controlar y prever posibles actos vandálicos en la zona. Esta vía amable se completará con un sendero de vegetación autóctona, con plantación de pinos carrascos en los alcorques y parterres de tipo arbustivo.