CARTAGENA. La alfarería de Totana será declarada Bien de Interés Cultural, como patrimonio etnográfico regional. Así lo ha aprobado la Comisión de Educación y Cultura de la Asamblea Regional de Murcia este jueves por unanimidad, en respuesta a una moción presentada por el PP. Entre otros argumentos, se ha barajado que en el municipio existen hornos de entre los siglos XVI y XX catalogados, esculturas con motivos cerámicos a lo largo del pueblo, decoraciones como las de la rambla de la Santa, el polígono El Saladar o la salida de la autovía 7 e incluso el nombre de sus calles, como el paseo de las Ollerías o la Tinajerías.
No ha salido tan bien parada la moción presentada por el PSOE para también declarar BIC las casas-torre del municipio de Murcia, ya que esta ha sido rechazada con el voto en contra del PP y la abstención de Vox. Por unanimidad ha salido la de Vox para restaurar el santuario y el convento lorquinos de la Virgen de las Huertas, dañados por los terremotos de 2011.
Respecto a la alfarería de Totana, cabe recordar que tiene su origen en la época medieval. Se trata de una antigua tradición que se ha llegado a mantener a través de muchas generaciones, remontándose algunas de ellas al s.XVIII. Asimismo, fue la cultura musulmana la que introdujo en la península ibérica de manera generalizada el uso del torno alfarero y el horno de tipo moruno que se sigue utilizando en la actualidad. Totana, 'ciudad alfarera', cuenta desde 1997 con un monumento al alfarero del escultor Anastasio Martínez Valcárcel, en el Paseo La Rivera. Y en el antiguo barrio de las ollerías se encuentra el 'Arco de San Pedro' o 'de las Ollerías', donde en el pasado se situaron los oficios alfareros de Totana.
Defensa del PSOE de las casas torre

- Museo de la Ciudad de Murcia -
- Foto: AYTO. MURCIA
La diputada regional socialista Lola Jara ha asegurado que el Partido Popular ha vuelto a demostrar "su desprecio hacia el patrimonio cultural de la Región", al oponerse a la declaración de Bien de Interés Cultural de las casas torre en el municipio de Murcia. Ha explicado que las casas torre constituyen un conjunto patrimonial de gran valor histórico, arquitectónico y social, únicas en el contexto del sureste peninsular.
Jara ha indicado que su restauración y rehabilitación de estas casas no solo implica conservar elementos arquitectónicos únicos, sino también recuperar la memoria de la huerta murciana, reforzar la identidad local y promover el turismo cultural y rural, en un momento en el que la arquitectura vernácula están en serio peligro de desaparecer. En este sentido, ha destacado que la mayoría de estas casas torre se encuentran en estado de abandono o ruina y amenazadas por el crecimiento urbano descontrolado, por lo que han sido incluidas por la Asociación Hispania Nostra en la lista roja del patrimonio.
“Algunas fueron derribadas, como ocurrió con las torres de la Marquesa, la del Huerto de las Bombas, o la de Torre de Romo. Otras corrieron mejor suerte, como la torre Junterón, que tras ser reformada alberga el Museo de la Ciudad de Murcia; la torre de los Ayllón, actual Museo del Belén en Puente Tocinos; la torre de los Marqueses en Espinardo, ocupada por el Colegio de la Consolación, o la torre Aledo de Churra, rehabilitada como residencia de mayores”.
Jara ha defendido la coordinación entre las administraciones regional, local y otros agentes como universidades, asociaciones vecinales, colegios profesionales y los propietarios, para establecer planes integrales de conservación y divulgación, así como su declaración como Bien de Interés Cultural, “algo fundamental para otorgarle un marco legal para su conservación”. “Esta declaración facilitaría, además, el acceso a fondos para su restauración, mantenimiento y uso público o cultural", ha añadido.