MURCIA. La Real Academia Alfonso X el Sabio, de Murcia, ha publicado recientemente el libro del canónigo y director del Museo de la Catedral de Murcia, Francisco José Alegría Ruiz, una obra esencial para la historia de dicho templo, y aun para la de la ciudad y reino al completo. El autor, asimismo doctor en Historia, ha indagado en los archivos de la Torre de la Catedral, y en otras diversas y selectas fuentes, y ha pergeñado un libro indispensable en toda biblioteca que tenga a bien atesorar lo mejor de la Historia nuestra, de este Reino, en combinación con la Historia española y europea del momento.
Sebastián Clavijo fue el deán, con plenos poderes en el Obispado de Cartagena y en el cabildo catedralicio, que el titular de la sede, el salzburgués Mateo Lang, dejó como encargado y responsable de la diócesis, en su ausencia, una ausencia que nunca se solucionó con ninguna presencia del titular en su sede. Mateo Lang fue obispo, de los llamados absentistas, entre 1512 y 1540, turbulentos tiempos en el Reino, en Castilla y aun en la Europa de la Reforma y Contrarreforma.
Leyendo el libro del canónigo Alegría Ruiz se toma conciencia de que el templo catedralicio late aún hoy en día"
En 1535, el deán Clavijo decide hacer una visita a la Catedral; es decir, una inspección de ubicaciones, imágenes, objetos eclesiásticos y todo haber que hubiere dentro del Templo de Santa María. Pero, el libro de Alegría Ruiz es algo más que la trascripción e interpretación del legajo que el deán Clavijo dejó en el archivo tras hacer su visita. Es todo un estudio, diacrónico y sincrónico, del templo en aquellos tiempos. Cuenta el autor las desavenencias, no siempre pacíficas, entre los miembros del cabildo, y aun con el exterior. No son tiempos fáciles, Y este libro lo demuestra.
Tiene el libro, a nuestro modo de ver, la virtud de incluir un plano, en el que, además de poder contemplarse el estado actual de las capillas que hoy podemos ver, se añade la disposición de las que había alrededor de la Claustra, hoy, Museo de la Catedral, explicadas una a una. Por ello, es un libro-documento y es un libro de testimonio de una Catedral, parcialmente ida. Y, es también, dicho queda una Historia de hombres, con una convivencia manifiestamente mejorable. La controversia de Clavijo y Junterón, por ejemplo, en estas páginas se halla, con buen criterio apuntada y seleccionada.
La Catedral de la Diócesis de Cartagena, en Murcia ubicada desde hace tres cuartos de milenio, nos parece, después de la lectura de este libro impar, un ser manifiestamente vivo, con una historia de paredes, muros, pilares, personas, avenencias, desavenencias, mostrando la Historia viva de la misma España, y, ni que decir se tiene que de Castilla misma. Leyendo el libro del canónigo Alegría Ruiz se toma conciencia de que el templo catedralicio late aún hoy en día.
Las impagables fotos de Joaquín Zamora ponen colofón a este gran libro.

- Visita de Sebastián Clavijo a la Catedral de Murcia, en 1535. -
- Foto: S. D.