MURCIA. Sigue creciendo el número de portadas de 'The Murcianer' realizadas por artistas de la Región inspirándose en 'The New Yorker', una iniciativa con las que se quiere presentar al público el trabajo de los muchos creativos que trabajan por estos lares, así como ensalzar la identidad murciana. Las últimas presentadas (que hacen los números 17 y 18 de la colección) son obra de la cartagenera Carmen Martínez y del mazarronero José David. Uno de los atractivos de este proyecto -ideado por el dibujante Van Saiyan y el fotógrafo y artista multidisciplinar Fede Leante- es dar a conocer mejor a estos artistas que están detrás de muchos de los objetos o experiencias que consumimos o forman parte de nuestro día a día (ilustradores, dibujantes de cómic, diseñadores gráficos, pintores, animadores, muralistas...).

Carmen Martínez es la autora del número 17 de 'The Murcianer', en la que representa "un bodegón ilustrado inspirado en algunas de las figuras más representativas de la historia y la cultura cartagenera. Cada elemento es un pequeño guiño a personajes como Carmen Conde, Arturo Pérez-Reverte, Manuel Wssel de Guimbarda, María Cegarra, Isaac Peral, Escipión el Africano… Me he entretenido muchísimo llenándolo de pequeños detalles ocultos relacionados con Cartagena, para que quien lo vea pueda ir perdiéndose buscando cada símbolo, descubriendo qué representa y cómo está conectado con la ciudad".

Añade la artista que "me apetecía hacer algo que hablara de toda la historia y la cultura tan extensa que tenemos, porque Cartagena es una ciudad súper rica, variada e interesantísima, y me gustaba la idea de dar a conocer un poquito más de nuestro pasado a través de estos detalles".

Ilustradora y tatuadora, Carmen Martínez cuenta que se graduó en Ilustración en la Escuela de Arte de Murcia en 2020 y "actualmente estoy cursando un máster en Ilustración Editorial y Publicitaria en LABASAD. Mi trabajo está centrado sobre todo en la ilustración editorial, donde disfruto creando imágenes muy coloridas, llenas de simbolismo, emociones y conceptos".

Y añade: "Siempre me ha interesado la capacidad del arte para comunicar sin necesidad de palabras. Me fascina que sea un lenguaje universal, que cualquier persona pueda entender o interpretar de mil formas distintas, y me gusta jugar con lo metafórico para darle forma visual a textos y pensamientos. Actualmente trabajo como freelance en proyectos variados, mientras sigo formándome, desarrollando proyectos personales y experimentando con nuevas formas de contar cosas a través de la ilustración".

Los males menores

Por su parte, el ilustrador mazarronero residente en Murcia José David Morales ha presentado la portada Los males menores: Encuentro improbable entre Tom de Finlandia y MC Escher... "En Murcia hay males menores y mares menores-explica-. Viendo la corriente de zaragüeles, refajos y pisotones de esparteña que le separan del aseo portátil, Tomás decide que aliviarse la vejiga en una de las puertas de la catedral; era un mal menor, por muchos siglos que tuvieran. En el mar menor (dorado) que brota de su carne se refleja la distancia que hay entre lo humano y lo divino, entre lo sagrado y lo profano; también se reflejan las miradas de dos carcamales que se han quedado de piedra. Pero a Tomás le da igual: al que no le guste, que no mire".

En cuanto a su presentación, José David cuenta que nació en Mazarrón hace algo más de 40 años. "Soy dibujante vocacional, inquieto y autoexigente. Mi trabajo establece un diálogo entre lo sobrio y lo voluptuoso, la delicadeza y el trazo horrible, la sensualidad del color y la austeridad del blanco y negro. Cada vez más enamorado del trazo del lápiz y del dibujo sobre papel, he podido ver publicado mi trabajo en periódicos como Il Corriere della Sera o el Washington Post y en editoriales como Alfaguara, Random House, la Esfera de los Libros o Flatiron Books".