Después de más de 16 años en los escenarios Arkano llega con su show de freestyle. Utopía es un espectáculo de música, comedia e improvisación, interpretado en salas y teatros por el rapero . El espectáculo está pasando por diferentes ciudades de España y este viernes 24 de mayo llega al Teatro Circo de Murcia. Tras su paso por Supervivientes, Arkano reflexiona sobre nuestra sociedad y el avance imparable de la Inteligencia Artificial. "El show pretende explorar la relación entre humanos y tecnología en pleno 2025. A través de ácidos diálogos, Arkano y la IA, tratarán de dirimir la gran cuestión: ¿puede la IA llegar a sustituir al ser humano?", reza la sinopsis del espectáculo.
Eres un rapero consagrado y te metes ahora a pelear con la inteligencia artificial, explícame un poco esta movida.
Bueno, pues esto es algo que sale de mi cabeza. Es un formato que no existía y viene un poco después de llevar ya más de 16 años haciendo shows. Al final, pues le vas dando 1.000 vueltas y cambiando una cosa, cambiando otra, siempre buscando innovar y hacer cosas distintas. Y de aquí nace Utopía, este show que parte de la premisa de que una inteligencia artificial secuestra el teatro y de repente nos pone a todos a prueba, no solo a mí, sino al resto del público también. Nos va poniendo una serie de pruebas que tenemos que pasar.
La parte principal del espectáculo es el freestyle, las rimas improvisadas, pero también tiene un alto componente de comedia. Comedia con mucha participación del público y una inteligencia artificial jugando un papel importante. La verdad que es un formato curioso.
Reflexionas un poco sobre la sociedad y la inteligencia artificial. ¿Por qué te nace crear un espectáculo alrededor de ella o como vehículo del espectáculo? No sé si te da miedo, respeto, si te preocupa de alguna forma…
Esta inquietud es un reflejo de la inquietud que tenemos en mayor y mayor o menor medida todos con la tecnología, no solo con la inteligencia artificial. En este caso está más centrado en la inteligencia artificial. En general, la tecnología siempre suscita debate. Más que tener miedo a lo típico, eso de que la inteligencia artificial pueda dominar el mundo y al final, las máquinas nos sometan a los humanos, es un poco reflexionar sobre la relación que tenemos con la tecnología, el uso que le damos. Es pensar si en muchas ocasiones es una herramienta a nuestro servicio o directamente, somos nosotros los que nos ponemos al servicio de la tecnología.
Creo que no le estamos dando la suficiente importancia a la inteligencia artificial, sobre todo a nivel legal. A la gente conocida ya le pueden copiar hasta las voces e incluso expresiones.
Todo lo que sean usos a nivel lúdico me parecen bien y sin problema. Sí que es verdad que el otro día veía un vídeo de un tío que ponía ejemplos que, con la inteligencia artificial, se estaban haciendo anuncios de estafas. Claro, yo ahí me acojoné. De repente pueden coger y sacar un vídeo mío diciendo: “Invierte en estas criptomonedas y parecía real.
Entonces vuelvo a lo de antes que te decía. Quizá deberíamos estar un poco más educados respecto al uso de estas tecnologías. Tanto a cómo lo utilizamos y también cómo podemos identificar, cuando veamos un vídeo, si es inteligencia artificial o no. Ahora es todo muy nuevo y vamos a ver que se cruzan muchos límites, pero creo que poco a poco se tendrá que ir regulando y nosotros tendremos que ir aprendiendo a relacionarnos con ellas.
Llevas desde los 15 años en esto y digamos en el foco 15 años. ¿Qué balances haces de toda tu carrera?
¿Te planteabas vivir de esto?
En ningún momento en ningún momento me planteé vivir de esto. De hecho, yo estudié una carrera universitaria. Estudié ingeniería informática en la Universidad de Alicante, y ese era ese era mi plan de vida. Realmente yo empecé a vivir de esto cuando iba a tercero de carrera.
Gané mi primer campeonato importante con 15 años y hasta los veintiún años más o menos no empecé a vivir de esto. Cuando yo empecé, tampoco era lo habitual que alguien que se dedicara a esto pudiera le pudiera dar para vivir. Entonces, claro que sí, un sueño cumplido sin lugar a duda. Evidentemente, tiene sus cosas negativas, pero las cosas buenas le superan por mucho.
¿Cuánto esfuerzo te ha costado? No sé si has tenido que dejar de ir a muchos planes
Ha sido muchísimo sacrificio. Muchísimas horas dedicadas, pero yo creo que horas dedicadas con gusto.
Un ejemplo que se me viene a la cabeza fue el no irme de Erasmus cuando estaba estudiando la carrera. Se juntó la cuestión de que no teníamos dinero, pero aún sin dinero estando becado, pues te lo puedes llegar a medio organizar y tal. Lo que me hizo decidirme definitivamente fue decir: “Es que yo tengo que estar en España. Si de verdad quiero apostar por mi carrera como rapero, si quiero hacer cosas”. Y como esto, pues muchas veces. Toda mi vida, todos mis planes, toda mi energía, mi tiempo mental y físico ha ido dedicado a esto. Ha ido dedicado al rap, ha ido dedicado a la creación, pero siempre con gusto. Por ejemplo, también cuando me acuerdo terminando de escribir mi primer libro, con 21 años, era en fiestas de Alicante, en hogueras que estaba todo el mundo de fiesta. Y estaba yo encerrado en la biblioteca todos los días escribiendo. Pero no era algo que me dolía. Desde fuera hay amigos que me lo recuerdan. Yo no lo estaba sintiendo realmente como como un castigo, sino que es tener un propósito. Yo creo que no hay nada más estimulante y nada más bonito que tener un propósito y tener una pasión, porque es que las horas no pasan.
¿De qué forma te ha cambiado el ser tan conocido desde tan joven? ¿Notas que ha influido en tu carácter?
Sin duda. De pequeñito he sido un chico súper tímido. Muy tímido, con pocas habilidades sociales. El tener exposición me ha hecho tener habilidades sociales a la fuerza, aprender a relacionarme a la fuerza. Luego, por otro lado, yo creo que a mí me ha venido muy bien el ir haciéndome conocido muy poquito a poco. Ha sido como escaloncito, escaloncito. De repente ganaba una batalla a nivel regional. Luego, algo a nivel nacional, pero en ese momento las batallas no eran tan grandes. Luego, hacer un récord, esta colaboración de no sé qué, pero muy, muy poco a poco. Entonces, quizás para mí ha sido algo más fácil de gestionar que, a lo mejor, otros casos en los que, de la noche a la mañana, le les ha venido muchísima fama. En mi caso, ha ido aumentando mi exposición poquito a poco desde que soy adolescente.
Par ser tan tímido como dicesno has parado de salir en televisión.
(Risas) La primera vez que me subí a un escenario a hacer una batalla les prohibía a mis padres que vinieran a verme. Mi madre, al final fue en secreto porque es que no se lo creía. “Es imposible que mi hijo se vaya a subir a un escenario a hacer algo y mucho menos a rapear contra otro. Ese no puede ser mi hijo. No puede ser mi hijo”, pensaba. Y ya pues con todo lo que ha venido después, la verdad que sí que he tenido bastante evolución al respecto.
Igualmente, eso sigue estando en mí. Yo sigo siendo una persona tímida. He aprendido que hay momentos en los que tengo que forzar el ser extrovertido. Realmente, cuando estoy en mi intimidad y conozco a alguien, por lo general suelo ser una persona bastante tímida.
Te he leído en alguna entrevista que hay mucho ego en el rap. ¿Consideras que sigue habiendo? ¿Cómo se controla este ego cuando eres tan joven?
La verdad que mal yo. A los 15 o 16 años, era un flipado. Yo veo vídeos ahora y me dan ganas de darme una hostia.
Ya sin ser conocido, la adolescencia es complicada de gestionar en uno mismo. Es una etapa en la que no tienes claro quién eres. Cuando encima estás un poco en el foco y, por un lado, estás recibiendo críticas y, por otro lado, gente que te está endiosando. Ahí lo tuve complicado de gestionar. Porque el rap al final se basa en el ego. Mucho del del contenido que hay en el rap, que yo también hago, va de decir “yo soy mejor que tú”. Tanto en batallas como en canciones. Forma parte de del ADN del Rap. A estas alturas, con 31 años, lo tengo bien colocado dentro de mi persona y entiendo lo que es el juego del rap y esa competición. Yo en mi vida no necesito creerme el mejor, ni necesito decir “soy mejor que tú” ni nada por el estilo. Sí que es verdad que en la adolescencia pues confundes más esos conceptos, y es complicado separar el juego. Es complicado separar la narrativa del rap de lo que es tu vida personal.
Además, te tuvo que pillar un poco el salto, digamos, generacional de la aparición de las redes sociales más o menos cuando empiezas a tener éxito.
La verdad es que yo ahí tuve bastante suerte, porque a lo mejor me pilla 15 años antes y era más complicado popularizar. Yo al final he ido sin discográfica, sin ninguna empresa ni nadie con dinero que me apoyara. Fue cuestión un poco del boca a boca de las redes sociales. En ese momento teníamos Myspace en Youtube, que se veían las batallas y tal y poco más. Entonces, bueno, al final, eso me ha ayudado mucho a crecer. Me ha ayudado mucho a descubrir otros artistas. Y la verdad que me siento muy afortunado con eso.
Veía un poco la lista, también de artistas con los que has colaborado y es impresionante. Alejandro Sanz, entre ellos, Ariel Roth… ¿Qué se siente cuando los tienes delante?
Un dato curioso es que a Alejandro Sanz nunca lo he tenido delante. Con Alejandro Sanz grabamos para el para el disco de Melendi. Con Melendi sí que me llevo bien y demás. Con Melendi. estuve grabando, haciendo la canción y Alejandro Sanz se sumó a posteriori y él grabó desde Miami, grabó su historia. Sí que hemos intercambiado alguna vez algún mensaje por redes sociales y alguna llamada, pero nunca lo he tenido delante físicamente. Sí, la verdad que tengo la suerte que dedicarme a esto me ha hecho trabajar con un montón de artistas a los que admiro. Y muchas veces hay un poco de complejo, está un poco el síndrome del impostor de decir hostia. De pensar ¿qué pinto yo aquí? Yo me dedico a juntar palabras y esta gente que a lo mejor sabe cantar, que sabe de música y yo aquí sabes a su lado trabajando.
Por último, has aparecido mucho en televisión y además te has involucrado en muchas causas sociales. ¿Cómo te organizas con tantas ideas a tu alrededor?
Mi pasión es comunicar, transmitir y pues ahora, por ejemplo, entre muchos proyectos. Estoy volcando todo eso en las redes sociales. Estoy generando más contenido que nunca. Era algo que lo tenía más en segundo plano, y ahora es una de mis actividades principales. Igual que en redes sociales, presentando programas, colaborando en radio, por ejemplo, en la cadena Ser llevo ya 8 años en la ventana con Carlos Francino, escribiendo libros, presentando eventos, haciendo canciones, haciendo freestyle, haciendo batallas. Mil historias que creo que el punto común que tienen todo es el comunicar. Es lo que lo que me apasiona.