Las restricciones impuestas este año por la Demarcación de Costas del Estado en Murcia están provocando graves dificultades a los hosteleros del litoral cartagenero, que denuncian que apenas un 15% de los chiringuitos de temporada están hoy operativos. Entre las nuevas condiciones que denuncian destacan la obligación de mantener una separación mínima de 50 metros entre los quioscos y las zonas de hamacas, y de 100 metros respecto a otras hamacas, así como la reducción del período autorizado para abrir, que ahora se limita del 1 de marzo al 15 de noviembre, en lugar de hasta el 31 de diciembre como en temporadas anteriores.
Además, Costas prohíbe la instalación de almacenes anexos, obliga a situar los aseos a una distancia mínima de seis metros del resto de la instalación y limita o elimina zonas con sombra fija, terrazas y pasarelas. Estos cambios, introducidos sin la suficiente antelación según los empresarios, están obstaculizando la planificación y puesta en marcha de los servicios de playa.
En respuesta a esta situación, el Ayuntamiento de Cartagena ha trasladado formalmente a la Demarcación de Costas las reivindicaciones del sector, recogidas a través de Hostecar, la asociación de hosteleros de la comarca. El documento municipal incluye observaciones técnicas y propuestas normativas que buscan una revisión de los criterios actuales de autorización demanial, con el objetivo de establecer un marco más ágil y viable que permita compatibilizar la protección del litoral con el desarrollo económico y turístico.